Si lo que buscas es una computadora que te dure muchos años, una PC de escritorio parece la mejor opción. Son más fáciles de actualizar, ofrecen mayor potencia y, en muchos casos, pueden ser más económicas a largo plazo. Pero aun con todas esas ventajas, me quedo con la laptop. La comodidad y la versatilidad que ofrece un equipo que puedes llevar a cualquier lado terminan pesando más en mi día a día. Estas son las cinco razones por las que sigo prefiriendo una laptop.
1. La portabilidad lo es todo
No importa si estoy trabajando en casa, en una oficina, mientras viajo o en otro destino, mi laptop va conmigo a cualquier parte. Claro, una PC de escritorio puede ofrecer un mejor rendimiento, pero no puede seguirme cuando necesito un cambio de escenario. Esto no solo aplica a viajes o salidas. A veces, simplemente quiero moverme a otra habitación, ya sea para trabajar desde el sofá, el comedor o el balcón. Y si tengo que salir a hacer algunos trámites, también puedo llevar mi laptop y aprovechar los tiempos de espera para trabajar.
Tener la opción de llevar mi computadora a cualquier parte también significa que no pierdo tiempo valioso (o de ocio). Incluso he logrado jugar en línea con mi pareja y amigos desde un país al otro extremo del hemisferio. Esta flexibilidad es algo que una PC de escritorio nunca podrá ofrecer.
2. Todo lo que necesitas en un solo dispositivo
Con una PC de escritorio, necesitas comprar cada componente por separado: monitor, teclado, mouse, webcam y otros accesorios. En cambio, una laptop integra todo en un solo equipo, lo que ahorra espacio y reduce el desorden en el escritorio. Si te gusta un ambiente minimalista, este tipo de equipo es la mejor opción.
Aunque existen PCs de escritorio todo-en-uno, siguen siendo menos portátiles y prácticas. Además, puedes añadir un mouse y usar el teclado incorporado o, si prefieres mayor comodidad, conectar un teclado externo y un mouse según tus necesidades y el espacio disponible. Y si requieres más área virtual para trabajar, simplemente conecta un monitor externo y tendrás dos pantallas para hacer todo más cómodo y eficiente, sin perder la flexibilidad de la portátil.
3. El poder de la nube extiende su vida útil
Las laptops han evolucionado con los servicios en la nube. Plataformas como Google Drive, Dropbox y OneDrive permiten almacenar archivos sin llenar el disco duro, lo que mantiene mi laptop rápida y eficiente por más tiempo. Además, muchas aplicaciones en línea eliminan la necesidad de contar con hardware de última generación ya que trabajan en la nube. Por ejemplo, edito imágenes y diseño prototipos de sitios web con Figma y utilizo los documentos en tiempo real de Google Docs y Google Sheets. Esto significa que una laptop (incluso de gama media) puede rendir más allá de sus especificaciones iniciales.
Otro beneficio es la seguridad. Si mi laptop se daña o la pierdo, toda mi información sigue segura en la nube y puedo acceder a ella desde otro dispositivo. Esto me da tranquilidad y hace que una laptop se sienta menos “descartable” a pesar de su vida útil más corta en comparación con una PC de escritorio.
4. La batería marca la diferencia durante los apagones
Una de las mayores ventajas de una laptop es su batería. A diferencia de una PC de escritorio que depende de una fuente de energía constante, una laptop sigue funcionando durante un apagón. Esto me ha salvado en más de una ocasión, permitiéndome terminar proyectos sin problemas. Incluso puedo compartir internet desde mi celular para subir archivos o publicar notas cuando lo necesito.
Algunas personas optan por un UPS o un generador de respaldo para su PC de escritorio, pero estas soluciones solo ofrecen energía por un tiempo limitado. Una laptop, en cambio, puede seguir funcionando durante horas, y con una batería externa o estación de energía portátil, se puede extender aún más el tiempo de uso sin depender de la electricidad.
5. Un gran respaldo de energía en momentos críticos
Hablando de batería, ¿has pensado que una laptop también puede servir como un banco de energía en emergencias? Si mi teléfono se queda sin batería, puedo conectarlo a la laptop para cargarlo, algo que me ha salvado más de una vez, sobre todo en apagones o viajes largos.
Algunos modelos incluso cuentan con baterías de alta capacidad y puertos Thunderbolt, lo que permite cargar otros dispositivos varias veces. Sin duda, es una función que vale la pena considerar.
¿PC de escritorio o laptop? Para mí, la elección es clara
Las PCs de escritorio lideran en rendimiento, durabilidad y capacidad de personalización. Son ideales para quienes necesitan un equipo realmente potente, ya sea para trabajar o jugar títulos de última generación. Pero para mi estilo de vida, la laptop es la ganadora, especialmente porque uso una laptop gamer (una Asus TUF Gaming F15 que compré en 2020). La portabilidad, el acceso a la nube y la independencia de la electricidad la convierten en una herramienta esencial en mi día a día.
Las PCs de escritorio pueden durar más, pero una laptop me mantiene conectada y productiva sin importar dónde esté. Por esas razones, sigo prefiriendo una laptop.