El Estado de Nueva York prohibirá a partir del 1º de enero de 2015 que se arrojen computadoras y otros equipos electrónicos en los contenedores de residuos domiciliarios, como parte del esfuerzo por controlar la basura electrónica o eWaste.
En 2012, en todo el mundo se produjeron casi 49 millones de toneladas métricas de basura electrónica, equivalentes a siete kilos por cada habitante del planeta. Para 2017, se espera según un estudio del Instituto de Sostenibilidad y Paz de las Naciones Unidas, que la cifra aumente en un 33%, y que representará el equivalente a once construcciones como la Gran Pirámide de Giza en Egipto o doscientos edificios como el Empire State en la ciudad de Nueva York.
El correcto descarte de estos dispositivos evitará que sus componentes tóxicos contaminen el suelo con sustancias tóxicas como el plástico, plomo, berilio, cromo, arsénico, cadmio, bario e incluso mercurio, altamente dañino en pequeñas dosis. Los antiguos monitores y viejos televisores, contienen tubos de rayos catódicos que son grandes contaminantes debido a su alto contenido en plomo y muy difícil de eliminar.
Los nuyorkinos dispondrán de varias opciones entre las que se encuentra la de reciclaje por donación a instituciones como el Ejército de Salvación o Goodwill, mientras que tiendas como Best Buy, RadioShack, Verizon, AT&T, y T-Mobile ya ofrecen el servicio de compra o canje de equipos usados en funcionamiento.
En cada barrio de ciudades, pueblos y pequeñas comunidades del Estado, se pondrá a disposición del público contenedores especiales y los edificios de apartamentos de más de 10 unidades podrán aptar por un programa de a recolección “a domicilio.”
La prohibición incluye baterías o pilas recargables, televisores, videoconsolas, tabletas, computadoras y otros periféricos.