Los datos personales de más de 300,000 usuarios de Mercado Libre podrían estar en riesgo tras el hackeo de la plataforma de comercio minorista. Así lo reconoció la propia empresa con sede en Buenos Aires (Argentina) y operaciones en 18 países de América Latina.
“Recientemente, hemos detectado que parte del código fuente de Mercado Libre ha sido objeto de acceso no autorizado”, manifestó la firma en una comunicación a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos. Por lo mismo, activó sus protocolos de seguridad y efectuó un “análisis exhaustivo” de la situación.
Según antecedentes de la compañía fundada en 1999 por Marcos Galperin, cerca de 300,000 de sus 140 millones de clientes activos pudieron verse afectados. Al cierre de esta nota, Mercado Libre descartaba que “las contraseñas de los usuarios, saldos, inversiones, información financiera o información de tarjetas de crédito se hayan liberado”.
“No hemos encontrado ninguna evidencia de que nuestros sistemas de infraestructura se hayan visto comprometidos”, añadió tras realizar un “análisis inicial”.
El hackeo a Mercado Libre fue reivindicado por el grupo cibernético Lapsus, luego de que el domingo 6 de marzo echara a correr en internet una encuesta para determinar su próximo objetivo. Vodafone e Impresa eran otros posibles blancos, informó Clarín.
El periódico argentino agregó que el sabotaje pudo ser a través de ransomware, al que definió como “un tipo de virus que bloquea la información del usuario y pide un rescate en dinero a cambio”. Los piratas aseguraron haberse apoderado de 24,000 bibliotecas de código fuente.
También conocidas como “repositorios”, son “carpetas en la nube con código fuente de un software, en algún servidor o servicio que almacena información”, de acuerdo con el programador y docente Maximiliano Firtman.