“Se emite la primera patente para el software, aún no se conocen todas las implicaciones”. De esta manera, la revista ComputerWorld titulaba en 1968 la publicación de la primera patente en la industria del software.
El responsable fue Martin A. Goetz, un informático estadounidense que trabajaba para la empresa Applied Data Research (ADR) y que buscaba desafiar a IBM, el entonces gigante de la tecnología.
Quizá sin dimensionar lo que su decisión provocaría, Goetz presentó la solicitud de patente el 9 de abril de 1965 ante el Departamento de Propiedad Intelectual de Estados Unidos.
Desafiando a los grandes
Hasta la década de los sesenta, el software no era visto como una industria independiente. En general, las aplicaciones se desarrollaban por solicitud de los clientes, que más tarde las incluían de forma gratuita junto al hardware.
“IBM y otras compañías de computadoras estaban regalando el software cuando vendían una computadora”, dijo Goetz en un documental sobre grandes inventores.
Goetz y ADR consideraban que era injusto. Las grandes compañías de la época obtenían grandes ganancias, a diferencia de los desarrolladores que no podían de vender sus aplicaciones.
“Estábamos tratando de vender software, pero vender contra software libre es muy difícil. Esa es la razón por la que traté de obtener una patente”, explicó.
Surge un mercado
En medio de esto, fue clave una conferencia a la que asistió en 1964 y que lo inspiró: la clave de una patente es que tenga una “actividad inventiva”.
Hasta entonces, todas las patentes habían sido para productos físicos, pero la apuesta de Geotz era para un sistema abstracto de cómo hacer cosas en una máquina.
El informático observó una oportunidad en los algoritmos de clasificación de datos, un tema clave para las computadoras centrales basadas en cintas magnéticas para el almacenamiento.
Un algoritmo más eficiente permitiría ahorrar tiempo al reducir el número de operaciones de lectura y escritura de datos.
Con eso en mente, Geotz presentó una solicitud para patentar un método de clasificación de datos. El 23 de abril de 1968, justo un día después de su cumpleaños 38, la patente número 3.380.029 fue aprobada.
“ADR presionó a IBM para que desagregara su software. Ese fue el comienzo de la industria del software”, reconoció con orgullo.
Hoy día, nadie cuestiona las patentes de software que se otorgan a diario para una industria que mueve millones de dólares.