Después de algunos meses de uso, la grasa, el polvo y las gotitas de café se acumulan en los teclados. Ni siquiera nosotros en Digital Trends en Español somos inmunes, y eso que somos expertos en estas cosas. Por eso compartiremos contigo nuestros secretos para que aprendas cómo limpiar el teclado del ordenador portátil.
Ya sea que necesites desinfectarlo, o una limpieza más profunda, estas son las mejores maneras de hacerlo. Pero antes de comenzar, hay algunos pasos cruciales que debes tomar.
La preparación
Dedica un minuto a estas precauciones de sentido común:
- Primero que nada, si tienes información vital en tu portátil, haz una copia de seguridad. Eso siempre es buena idea.
- Apágalo completamente. Si puedes, también quítale la batería.
- Asegúrate de que el dispositivo esté desconectado y que no tenga ningún accesorio (incluyendo los dongles USB).
- También asegúrate de contar con el espacio y el tiempo suficientes. Limpiar el teclado no es algo que se deba hacer con prisa – recuerda, el teclado de un ordenador de escritorio es fácil de cambiar, pero si dañas el teclado del portátil, estarás en problemas.
Para el polvo acumulado
Todo el mundo sabe cómo se ve esto. Tal vez no sea tan malo como una mancha pegajosa, pero con el tiempo, el polvo se acumula entre las teclas. Si quieres deshacerte de él, ve por un aspirador.
¡Pero espera! No cualquier aspirador. La solución más adecuada es un aspirador de mano que tenga un pequeño cepillo para poder maniobrar lentamente por las teclas mientras succionas el polvo. Un aspirador más grande puede funcionar si también cuenta con el accesorio correcto y no es demasiado potente. Después de todo, la idea no es que el aspirador se trague una tecla.
En un mundo ideal, la solución sería un microaccesorio para aspirador, cosa que normalmente no se encuentra fuera de los laboratorios y las estaciones de trabajo especializadas; si realmente te quieres tomar en serio el cuidado de tu teclado, puedes adquirir el tuyo.
Otra posibilidad es usar aire comprimido, aunque no te lo recomendamos. Esta es un arma de doble filo, pues aunque lanzará lejos gran parte del polvo y las migajas, también podría hacer que algo de la suciedad se vaya más adentro, y esto podría ser un problema. Normalmente el aspirador es la solución más eficiente.
Para la mugre que no se va
Nos referimos a toda esa porquería que se acumula y contribuye a crear esa placa y manchas repugnantes en tu teclado: piel muerta, grasa, migajas de comida, etcétera. Hay diferentes maneras de enfrentar esta misión de limpieza, pero nosotros preferimos una esponja de melamina, un accesorio excelente para limpiar este tipo de suciedad.
Cuando tengas la esponja de melamina, empápala de agua, exprímela y déjala secar lo suficiente para que no deje marcas de agua en tu teclado. Frota cuidadosamente una esquina de la esponja en las partes sucias de las teclas hasta que queden limpias. La melamina puede ser un material muy abrasivo si no se tiene precaución, así que tómatelo con calma. No vayas a borrar una letra de una tecla. Este material también es muy fácil de cortar; puedes recortar una porción en la forma necesaria para un trabajo más especializado.
Puedes hacer lo mismo con otro tipo de esponja, aunque podría no ser tan efectiva, sobre todo con las manchas más obstinadas.
Para los gérmenes
Es normal que te preocupen los gérmenes de tu teclado, especialmente si sueles trabajar en una oficina o en un salón de clases lleno de gente enferma. Si tus teclas están muy sucias y piensas que podrían convertirse en un peligro para la salud, es hora de sacar el desinfectante.
Específicamente, consigue algo de alcohol isopropílico y un montón de hisopos de algodón. El alcohol isopropílico (del que se usa para las curaciones) es esencial, porque con algo más fuerte podrías eliminar algunas de las letras de las teclas. Los hisopos, por su parte, son cruciales para mantener los líquidos lejos del teclado, incluso mientras limpias. Sumerge un hisopo en el alcohol y presiónalo ligeramente para que esté húmedo pero sin peligro de escurrir. Luego limpia tus teclas, una a una. Este método es algo tedioso pero muy efectivo. Será más fácil si haces esto cuando estés algo aburrido y tengas algo de tiempo sin nada que hacer.
Para los derrames
¿Derramaste algo potencialmente pegajoso sobre el teclado de tu portátil? Tu prioridad debe ser proteger el ordenador y sus componentes internos. Apaga todo, saca la batería y si es necesario, desconéctalo. No lo vuelvas a encender hasta que estés completamente seguro de que todo el líquido se ha evaporado – y esto puede tomar un día o hasta dos con los peores derrames. Si parece que tu sistema operativo o tus datos se han dañado, llévalo a reparar de inmediato.
Mientras tanto, es hora de limpiar las teclas. Un paño o esponja será suficiente para la superficie del teclado del portátil, aunque probablemente tendrás que profundizar más para limpiar los residuos más preocupantes que podrían encontrarse atrapados por debajo. Nos referimos a que hay que quitar el teclado. El problema es que existen muchos tipos de teclados de portátiles, según la edad y el diseño de tu equipo. Algunos se pueden levantar como una unidad completa, mientras que otros se desmontan tecla por tecla. Y otros no están diseñados para quitarse en absoluto.
Si puedes quitar las teclas y limpiar con cuidado alrededor de ellas, eso es lo que debes hacer. Solo recuerda hacerlo muy suavemente y evitar las herramientas que puedan doblar o rasguñar las teclas. Si parece que podría ser demasiado trabajo, no dudes en llevar tu portátil con un profesional que pueda desarmarlo sin riesgos de dañarlo.