Google es investigado de nuevo por la Comisión Europea por monopolio, después de haber recibido una multa histórica debido al abuso de su posición dominante por medio de Android.
Esta nueva investigación podría significar otra sanción millonaria para la compañía, la cual incluso rebasaría los miles de millones de dólares.
Por lo mismo, la estrategia de los abogados de la tecnológica ha consistido en demostrar que si ellos tienen esa posición dominante es porque los usuarios prefieren su buscador.
La defensa ha presentado datos que muestran que Google también es lo más buscado en su competencia, como Bing, donde el término “Google” aparecería entre lo más ingresados por los usuarios.
La intención de la compañía es dejar en claro que las personas no son “forzadas” a utilizar su buscador, al contrario, recurren a este porque es “muy popular”.
Google considera que la sanción impuesta por la Comisión Europea es injusta. Cuando fue decretada en 2018, la compañía se defendió y afirmó que Android había creado “más competencia y elección”.
También dijeron que cualquier usuario podía cambiar de motor de búsqueda “si así lo desea”.
Como parte de la defensa, los abogados de la compañía han agregado que “la cuota de mercado de Google en el ámbito de las búsquedas generales es consistente con las encuestas a consumidores que muestran que 95 por ciento de los usuarios prefieren Google a motores de búsqueda rivales”.
La empresa se encuentra a la espera de que culmine la investigación europea; la última sanción le costó a Google 5,000 millones de dólares.