Los fanáticos de ChromeOS de Google no tenían demasiadas opciones cuando se trata de computadoras Premium, con la mayoría de los Chromebook enfocados en los presupuestos bajos. Pero ahora, los dispositivos top Google Pixel Slate y Pixelbook –que comienzan en $600 y $1,000 dólares respectivamente– pueden ofrecer características excepcionales para los fanáticos de ChromeOS que busquen la mejor experiencia posible.
El Pixelbook de Google se presentó en 2017, mostrando al mundo cómo se vería un verdadero Chromebook Premium si el precio no fuese un factor limitante. La apuesta continúa este año con el nuevo Pixel Slate, y ahora ambos dispositivos ocupan el lugar de Chromebooks Premium. Está muy bien, sí: pero ¿cuál es la mejor opción para tu vida diaria entre estas dos máquinas?
Diseño
Tanto el Pixelbook como el Pixel Slate son equipos Premium fabricados con aluminio, contando además con el resistente cristal Corning Gorilla Glass. Como tableta, el Pixel Slate cuenta con una trasera de aluminio en azul medianoche con una hermosa pantalla en su parte frontal. El Pixel Slate se presenta como una computadora portátil con un acabado de aluminio plateado y un toque de vidrio blanco en su tapa. Si bien ambos dispositivos están forjados con los mismos materiales, sus diseños generales cumplen funciones muy diferentes.
El Pixelbook original sigue el modelo estándar de un portátil con teclado, trackpad y pantalla incorporados. Si abres el Pixelbook te encontrarás con la experiencia de computadora portátil como muchas otras, aunque si echas la pantalla hacia atrás verás que cuenta con una bisagra de 360 grados. Capaz de girarse completamente hacia atrás, la pantalla del Pixelbook crea una experiencia propia de tableta.
Por su parte, el Pixel Slate es una tableta. En la caja, el Pixel Slate no incluye un teclado o trackpad, sino solo una pantalla plana que debe controlarse completamente a través de la entrada táctil. El nuevo Pixel Slate Keyboard –que se vende por separado– puede transformar tu experiencia al agregar una cubierta de teclado con los componentes faltantes para mejorar su uso cuando lo necesites para trabajar.
Como con la mayoría de los dispositivos híbridos, estos normalmente son mejores en algunas funciones más que en otras. Si lo que buscas (o necesitas) es una computadora portátil tradicional, lo más probable es que te sientas más feliz con el Pixelbook, pero si crees que el futuro es de las tabletas, entonces el Pixel Slate podría ser para ti.
Rendimiento
ChromeOS es un sistema operativo ligero que generalmente no requiere de mucha potencia bajo el capó, con bastantes modelos de buen presupuesto que vienen empaquetados con una CPU Intel Celeron acorde. Sin embargo, las máquinas emblemáticas de Google te dan la opción de subir la calidad con procesadores Intel Core bastante respetables y rápidos. Agrega una buena cantidad de RAM y ambos dispositivos estarán listos para abordar la web sin problemas.
Google Pixelbook permite a los consumidores elegir entre un procesador Intel Core i5 o i7 de séptima generación, los cuales –a pesar de tratarse ahora mismo de una generación obsoleta– no parecen “viejos” al utilizar la plataforma ChromeOS. Respaldado por 8GB o 16GB de RAM, el Pixelbook podrá tener un año de antigüedad, pero sus especificaciones deberían mantener a sus usuarios funcionando por un buen tiempo en el futuro. Además, el Pixelbook ofrece opciones de almacenamiento bastante grandes para una máquina de su clase, con opciones SSD de 128GB, 256GB y 512GB disponibles.
El Pixel Slate es menos poderoso en su configuración básica debido a su procesador Intel Celeron, pero da a los compradores la opción de actualizarse a las últimas 8 procesadoras Intel Core m3, i5 o i7. Las opciones de memoria también comienzan un poco más abajo: 4GB. Pero los usuarios pueden aumentar ese número a 8GB o 16GB por una tarifa adicional. Dependiendo del modelo de Pixel Slate que compres, hay diferentes opciones de almacenamiento disponibles, con la opción Celeron de gama baja que ofrece 32GB o 64GB de almacenamiento SSD, y hasta 256GB en la variación Intel Core i7.
Ambos dispositivos ofrecen excelentes experiencias de entretenimiento con pantallas de 12.3 pulgadas y sistemas de bocina duales. El nuevo Pixel Slate ofrece una pantalla ligeramente mejorada, que Google denomina Molecular Display, y presenta una nitidez mejorada de 293 píxeles por pulgada (PPI) en comparación con la todavía respetable 235 PPI de Pixelbook. Ambas pantallas tienen una capacidad de 400 nits de brillo, ofrecen pantallas táctiles compatibles con el Pixelbook Pen de Google, cubriendo el 72 por ciento del espacio de color NTSC.
Aquellos que buscan una selección de puertos saludable no encontrarán mucho más que algunos USB-C. El Pixelbook cuenta con dos puertos USB-C, un sensor de huellas dactilares y un conector para auriculares de 3.5 mm, mientras que el Pixel Slate ofrece dos puertos USB-C y el conector de accesorios del Teclado Pixel Slate.
Así es: el Slate no tiene un conector para auriculares de 3.5 mm, y los usuarios tendrán que confiar en auriculares inalámbricos o un adaptador USB-C con cable para escuchar sus melodías.
Portabilidad
El Pixelbook y el Pixel Slate están diseñados para viajar, no son máquinas concebidas para pasar sus vidas sobre un escritorio. Ambos dispositivos presentan cuerpos de aluminio, lo que los hace robustos a la vez que livianos. Lo mejor de todo es que ambas unidades tienen la misma duración nominal de batería de hasta 10 horas con una sola carga, con capacidad de recargarse rápidamente para dos horas más de uso en solo 15 minutos.
El Pixelbook pesa 2.4 libras y cubre un espacio dimensional de 11.4 pulgadas de largo, 8.7 pulgadas de ancho y 0.4 pulgadas de grosor. En definitiva, un paquete limpio y compacto, ideal para nómadas digitales que van de un lado a otro. En comparación, el nuevo Pixel Slate pesa 1.6 libras y cubre un espacio de 11.45 pulgadas de largo, 7.95 pulgadas de ancho y 0.27 pulgadas de grosor. Por supuesto, aquellos que lo usen con su teclado sumarán otras 1.1 libras y 0.2 pulgadas de grosor.
Hablando del Pixel Slate Keyboard, los usuarios que opten por comprar este accesorio podrán conectarlo fácilmente mediante el Quick Snap Connector de Google, y no deberán preocuparse por recargarlo por separado. Hecho de poliuretano, microfibra y vidrio, el teclado del Slate es un complemento excepcional, pero no es barato: $200 dólares.
Para aquellos que viven de viven el mundo de las videollamadas y conferencias, ambas unidades incluyen micrófonos a bordo con cancelación de ruido y cámaras frontales. El Pixelbook está limitado por una cámara web de 720p, mientras que el Pixel Slate ofrece una de 8MP 1080p, además de una cámara trasera de 8MP que también captura video de 1080p.
Hechos para la web
Chrome OS es una plataforma creada para estar siempre en línea. Si bien Google proclama con orgullo que sus dispositivos se pueden usar fuera de línea y redactar borradores de documentos y correos electrónicos de Google, el sistema operativo brilla cuando se lo conecta a Internet. Se debe decir que Google está tratando de hacer que todo el proceso «siempre en línea» sea más sencillo para los usuarios de Pixelbook y Pixel Slate.
Dispositivos como el recientemente anunciado teléfono inteligente Pixel 3 XL de Google pueden emparejarse automáticamente con tu Pixelbook o Pixel Slate para un anclaje a red LTE cuando no haya una conexión WiFi disponible. Este simple paso hace que el proceso de abrir tu computadora Pixel en cualquier lugar y de tener acceso a Internet sea un paso más hacia la perfección. Por supuesto, deberás llevar contigo el último teléfono inteligente de Google, y no cualquier dispositivo Android.
Curiosamente, una característica ausente en dos dispositivos que requieren una conexión a Internet para brillar es la conectividad LTE. Si bien ambas máquinas cuentan con conjuntos de chips WiFi de alta velocidad y Bluetooth 4.2, ninguna de ellas ofrece la posibilidad de conectarse a una red celular en movimiento sin necesitar un teléfono inteligente a su lado.
Pixel Slate es nuevo, pero el Pixelbook todavía responde bien
El Pixel Slate de Google es el dispositivo más nuevo. Es menos costoso, tiene un hardware más moderno y es –ante todo– una tableta.
Esto no significa que el Pixelbook sea ya una pieza irrelevante. El Pixel Slate no es una computadora portátil y no está diseñado para ese uso como modo primario. Los fanáticos de Chrome OS que prefieran algo más convencional, con un gran teclado y una pantalla más grande, todavía deberían preferir el Pixelbook.