Había que ser astuto y privilegiado para llegar a la escuela en 1996 y dejar sobre el escritorio una tarea de geografía impresa desde la enciclopedia Microsoft Encarta. Era la época previa al internet de masas, de modo que solo otro astuto y privilegiado alumno sería capaz de advertir al maestro o maestra sobre la fechoría en cuestión: aquella tarea ejemplar seguramente tomó más tiempo en salir de la impresora que en aparecer en la que por al menos una década fue la enciclopedia multimedia por excelencia.
Microsoft Encarta fue una enciclopedia multimedia (es decir, que incluía texto, imágenes y video) que tuvo varias ediciones anuales entre 1993 y 2009. Para millones de milenials, probablemente es la primera referencia cuando piensan en una enciclopedia para computadoras, en parte porque Wikipedia –la segunda referencia para el tema en cuestión– no debutaría sino hasta 2001, cuando internet comenzaba a convertirse en un servicio común.
La magia del proyecto Gandalf
Corría 1987 y Bill Gates, en plena promoción del CD-ROM como herramienta para la distribución de software, ideó una colección de obras de referencia que llamó Microsoft Bookshelf. El programa tuvo éxito y de hecho se comercializó hasta el 2000. Sin embargo, apenas dos años después de la presentación de Bookshelf, la Enciclopedia Compton’s logró un hito: meter la información de sus 26 volúmenes en un diminuto CD-ROM. Este hecho dio a Microsoft norte sobre hacia dónde debía enfocar sus esfuerzos.
Microsoft inició el desarrollo de Encarta bajo el nombre código de Project Gandalf. En un inicio, el proyecto consistió en digitalizar el contenido de la Enciclopedia Funk & Wagnalls, a la que compró contenido luego del rechazo de la Enciclopedia Británica para licenciar su obra a Microsoft.
Encarta debutó el 22 de marzo de 1993. Incluía 22,000 artículos, varios de ellos ilustrados. No obstante lo vistoso del formato, la auténtica novedad era el buscador integrado. Apenas se tecleaban unas palabras se ofrecían sugerencias que hacían de la tarea una experiencia rápida y hasta placentera. El producto era perfecto hasta que uno se topaba con su precio: $395 dólares. Encarta era increíble, pero también era un lujo.
Eso cambió al cabo de unos meses. Para la temporada decembrina de 1993, Microsoft redujo su precio a $99 dólares y con ello logró que Encarta llegara a más hogares. Entonces se volvió un producto con actualizaciones anuales que incluían más artículos, más ilustraciones, gráficos interactivos y hasta video.
Un producto de Microsoft
Si Encarta era fácilmente identificable como un producto de Microsoft no solo se debía a su precio, sino también a los increíbles sonidos de arranque de cada edición. Si bien ninguno fue tan memorable como el legendario boot sound de Windows 95 compuesto por Brian Eno, varios transmitían un sentido de conocimiento épico, como si literalmente se abriera una enciclopedia con miles de caminos hacia el saber.
Del uso de Encarta en América Latina destaca que varios la usamos con copias pirata. Quien firma este texto recuerda haber consultado varias ediciones de la enciclopedia, pero solo una de ellas original, probablemente la de 1996 que venía incluida con una computadora Acer Aspire. En los años noventa, era habitual que Microsoft firmara convenios con fabricantes para incluir su software en computadoras nuevas.
Luego llegó la revolución del internet de masas, con Google y Wikipedia entre sus estandartes. Varios de los datos consignados en este artículo fueron tomados de la página de Wikipedia de Microsoft Encarta. Vaya paradoja.