Desplegado parece un celular común y corriente, pero cerrado cabría en la palma de una mano. Este sería el aspecto que tendría el próximo teléfono plegable tipo «almeja» en el que trabaja Samsung para presentarlo probablemente en 2020, y que informalmente ha recibido el nombre de Galaxy Fold 2.
Así al menos se refleja en las imágenes publicadas por la cuenta Ice Universe, conocida por filtrar características de dispositivos tecnológicos, y que asegura que se trata de fotografías que circulan en las redes sociales chinas. Las instantáneas confirman una serie de trascendidos anteriores.
Al igual que el Motorola Razr, la pantalla estrecha y alta del teléfono de Samsung se plegará hacia en forma horizontal, en lugar del mecanismo tipo libro del Galaxy Fold. Aún no está claro si el fabricante surcoreano ha introducido mejoras en la tecnología de visualización.
Las imágenes también revelan biseles gruesos alrededor de los bordes, que probablemente se han colocado para sostener de forma segura la pantalla plegable. En el medio, no se visualizan arrugas ni tampoco bisagra. Al igual que la próxima serie Galaxy S11, este dispositivo también cuenta con una cámara perforada en el centro.
Cuando se cierra por completo, el teléfono se pliega de forma tal que cabe en la palma de una mano. Hay dos cámaras en la parte posterior, y junto a ellas Samsung ha instalado una pequeña pantalla que muestra constantemente la hora, la fecha, el nivel de la batería y posiblemente otras notificaciones. En la parte inferior, un puerto USB tipo C está flanqueado por altavoces.
Precio conveniente
En las últimas semanas, una serie de trascendidos aseguran que el precio del próximo teléfono plegable de Samsung no superaría los $1,000 dólares. Eso explicaría lo que parece ser una cubierta de policarbonato y solo dos cámaras en la parte posterior, a diferencia de la línea S11, que tendría al menos cuatro sensores.
Este nuevo lote de imágenes también coincide con lo señalado por Bloomberg. De acuerdo con su versión, el próximo plegable de Samsung será más delgado y asequible, y tendrá una pantalla interna de 6.7 pulgadas, que se reduciría «a un cuadrado con bolsillo cuando se pliega hacia adentro» y una cámara para selfie, como el Galaxy Note 10 Plus.
Según algunas fuentes, Samsung podría presentar este teléfono junto con la serie Galaxy S11 en febrero de 2020.