Hace unos días, Samsung ordenó el retiro mundial de su phablet el Galaxy Note 7 tras descubrir que la batería podría causar una explosión al ser cargada.
Ahora una profesora en el Reino Unido afirma que su Galaxy S7 Edge explotó y se incendió mientras que lo tenía en la mano.
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La profesora Sarah Crockett de 30 años se encontraba en un cafe con su esposo mientras utilizaba su Galaxy S7 Edge. De repente, el teléfono inteligente se calentó y registró una pequeña explosión, informa el periódico inglés, The Sun.
«De repente se expandió en mi mano y se puso muy, muy caliente», dijo Crockett. «Se me cayó sobre la mesa. En tan solo algunos segundos había humo por todas partes y salté fuera del camino. El teléfono estaba completamente quemado».
El evento fue grabado por un circuito cerrado de televisión que revela claramente como, de un instante a otro, todo el restaurante se llena de humo que sale de la mesa donde Crockett y su esposo estaban sentados.
«He perdido todas mis fotos, incluyendo las de mi hijo de 4 años de edad y la imágenes del primer día de colegio de Ollie. Pero, ¿qué hubiera pasado si el dispositivo hubiera estado en las manos de alguno de ellos? ¿Y si hubiera estado conduciendo»? dijo Crockett.
Esta explosión en el Reino Unido se une a la lista de quejas registrados por usuarios alrededor del mundo. Según algunos expertos, este último incidente podría provocar una nueva crisis para Samsung, que actualmente se encuentra en un lío debido al Galaxy Note. Lo más curioso es que en los Estados Unidos el Note fue retirado por calentarse mientras se cargaba. En al caso de Crockett, el teléfono inteligente no estaba cargándose.
Por su parte, una portavoz de Samsung dice que, «No hay problemas de seguridad conocidos con los dispositivos Galaxy S7. Este problema está siendo investigado y nuestro equipo de atención al cliente está en contacto con la dueña de este dispositivo».