Tras ocho décadas, Volkswagen ha producido en su planta de Puebla (México) el último Escarabajo. Tras despedir el vehículo, también conocido como Beetle y Vocho, la fábrica se dedicará a la construcción de un nuevo SUV ideado para el mercado estadounidense.
Bautizado como Tipo 1, el original nació en 1938 como una herramienta de propaganda nazi y se transformó en un ícono cultural. Ideado por el ingeniero austriaco Ferdinand Porsche, se hizo tan inconfundible como una botella de Coca-Cola, según ha recalcado Associated Press.
Al cumplir 40 años, las instalaciones de Wolfsburgo (Alemania) cesaron su producción, que se desarrollaba en América Latina desde 1967. Cuando se construyó el último de sus ejemplares en 2003, Volkswagen había vendido en todo el mundo 21.5 millones de la primera generación.
«A diferencia de Alemania Federal, donde su bajo precio, calidad y durabilidad representaban una nueva normalidad en la posguerra, las características del Beetle le otorgaron en Estados Unidos un aire profundamente poco convencional, en una cultura automotriz dominada por el tamaño y la espectacularidad», planteó Bernhard Rieger en El auto del pueblo (2013), citado por la agencia con sede en Nueva York.
La segunda, que se lanzó como New Beetle porque el original aún se estaba construyendo en México, ayudó a iniciar una ola de diseños retro. La marca alemana comercializó 1.2 millón de unidades entre 1998 y 2010.
Se suponía que la tercera generación continuaría con el legado, combinando el estilo clásico con la mecánica moderna. Entre otras variedades, Volkswagen desarrolló un #PinkBeetle y otra edición probó suerte en las carreras de rallycross.
Pero el Escarabajo de tercera generación no tenía el novedoso diseño del original con motor trasero refrigerado por aire y nunca se convirtió en un referente de la moda. De todos modos, más de medio millón de ellos se puso en la calle desde su estreno en 2011.
Volkswagen anunció el fin de la producción a finales de 2018, lanzando un modelo de edición especial y limitada a 5,961 unidades para conmemorarlo. El último Beetle, un coupé Denim Blue, se exhibirá en el museo que la empresa tiene en la planta de Puebla.
Los últimos Beetle construidos para Estados Unidos, un par de King Red con tableros personalizados, llaves y asientos acolchados, se unirán a la colección histórica.
Volkswagen no tiene planes para reemplazar directamente al Vocho, dado que la fábrica mexicana se enfocará en una nueva SUV compacta, cuya ubicación en el catálogo será debajo de la Tiguan, según un comunicado de prensa.
Pese al adiós de su carro más icónico, la firma está lejos de desprenderse de lo clásico. Para 2022, el fabricante planea lanzar una versión de producción de la conceptual ID Buzz, un homenaje totalmente eléctrico a otro de sus productos entrañables: la furgoneta Combi (Transporter).