Al igual que Tesla, Toyota confiará en las cámaras de video para desarrollar la tecnología de sus vehículos autónomos. Así lo informó Woven Planet, subsidiaria de la japonesa, que seguirá trabajando con los costosos radares y sensores láser (lidar).
“Necesitamos muchos datos. Y no es suficiente con una pequeña cantidad recogidos por una diminuta flota de vehículos autónomos muy caros”, explicó a Reuters Michael Benisch, vicepresidente de Ingeniería de Woven Planet.
El reto de la filial es “desbloquear” una de las ventajas que un gran fabricante de automóviles como Toyota tendría en el acceso a “un enorme corpus de datos, pero con una fidelidad mucho menor”. Asimismo, remarcó que no es escalable pensar en automóviles robotizados con sistemas inasequibles.
La agencia británica puntualizó que Woven Planet emplea cámaras 90 por ciento más baratas que los sensores que utilizaba. Además, los dispositivos de captura de video “pueden instalarse fácilmente” en sus flotas de coches.
Las primeras pruebas fueron satisfactorias para la subsidiaria de Toyota, pues sus sistemas autónomos experimentaron rendimientos positivos. En otras palabras, los datos de muchas y baratas cámaras fueron tan buenos como los de pocos y costosos radares y sensores lidar.
En palabras de Benisch, “dentro de muchos años, es muy posible que la tecnología de las cámaras se ponga al día y supere a algunos de los sensores más avanzados […] La cuestión puede ser más bien cuándo y cuánto tiempo tardará en alcanzar un nivel de seguridad y fiabilidad. No creo que lo sepamos todavía”.