El Spirit of Ecstasy o Espíritu del Éxtasis, nombre con el cual se conoce a la mujer alada que enfrenta el viento sobre las parrilla de los automóviles de Rolls-Royce, es junto con la estrella de tres puntas de Mercedes-Benz uno de los adornos automotrices o mascotas más reconocibles en la historia del automóvil.
También es uno de los más antiguos, pues fue adoptado oficialmente como mascota de los automóviles Rolls-Royce el 6 de febrero de 1911, después de que el fabricante inglés comisionó al escultor Charles Robinson Sykes la creación de una figura que representara “el espíritu del Rolls-Royce: la velocidad con el silencio, la ausencia de vibraciones, el misterioso aprovechamiento de una gran energía y un hermoso organismo vivo de suprema gracia”. Hoy, 111 años después, Rolls-Royce anunció la modificación del Espíritu del Éxtasis.
Por fortuna, no se trata de una modificación sustancial y quien la vea no la confundirá con ninguna otra cosa que no sea el Espíritu del Éxtasis. Sin embargo, esta vez Eleanor, como también se la conoce en honor a la modelo Eleanor Velasco Thornton que sirvió de inspiración a Sykes, es más baja, está más inclinada hacia adelante —como si desafiara el viento— y no se encuentra por completo erguida sino que está agachada con las piernas dobladas, una ligeramente al frente de la otra, lo que la hace más aerodinámica que nunca. Rolls-Royce se refiere a la nueva figura como a una “verdadera diosa de la velocidad”.
La nueva versión del Espíritu del Éxtasis debutará en el primer vehículo eléctrico de la marca, el Rolls-Royce Spectre, que se espera debute en 2023. La necesidad de mejorar la resistencia al viento en el adorno se centra en que en el Spectre, al igual que en cualquier otro automóvil eléctrico, la aerodinámica es de importancia fundamental para maximizar el aprovechamiento de la energía disponible. Rolls-Royce aún no ha mostrado oficialmente el Spectre EV pero sí ha dicho que contará con un coeficiente de resistencia al viento extraordinariamente bajo de 0.26.
Torsten Müller-Ötvös, CEO de Rolls-Royce, dijo que “el Espíritu del Éxtasis es la mascota automotriz más famosa y deseable del mundo”, y agregó que “más que un simple símbolo, es la encarnación de nuestra marca y una fuente constante de inspiración y orgullo para la marca y sus clientes”. El ejecutivo también recordó, probablemente en anticipación a las críticas de los puristas, que igual que la marca misma el Espíritu del Éxtasis “siempre se ha movido con los tiempos sin dejar de ser fiel a su naturaleza y carácter”.
En 1930, por ejemplo, Rolls-Royce comisionó una versión alterna de la figura arrodillada para ser usada en un automóvil de carácter más deportivo y evitar que la figura obstruyera la visión del conductor. El Espíritu del Éxtasis de rodillas fue usado entre 1934 y 1939.
La mascota actual corresponderá a modelos Rolls-Royce equipados con motores de combustión interna, mientras que la nueva versión incrementará su presencia a medida que el histórico fabricante inglés, hoy propiedad de BMW, incorpore modelos eléctricos.