La Administración Nacional de Seguridad de Tráfico de Carreteras de los Estados Unidos (NHTSA) ha cerrado su investigación sobre el sistema tecnológico de conducción semi-autónomo de Tesla. Los funcionarios no identificaron ningún defecto, y no pedirán a la compañía californiana que lo retire de sus automóviles.
La NHTSA comenzó a investigar el sistema de Tesla el año pasado, todo después de que un Model S se estrellara con un tractor que cruzaba una carretera en Florida. El piloto automático no pudo detectar el remolque, y su conductor, Joshua Brown, se convirtió en la primera muerte conocida en un automóvil operando semi-autónomamente. Algunos culparon de esta muerte a un mal funcionamiento del piloto automático, mientras que otros afirmaron que la tecnología no estaba siendo usada correctamente.
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Tesla ha subrayado en repetidas ocasiones que el piloto automático no hace a sus carros completamente autónomos. El sistema permite que el Model S y el Model X sigan por su cuenta el tráfico, frenen y hagan cambios en de carril, pero se necesita que el conductor permanezca alerta y listo para asumir el mando en todo momento.
Los policías estatales que llegaron a la escena poco después del accidente dijeron a Reuters que se encontraron con un reproductor de DVD mostrando una película de Harry Potter, induciendo por ello que Brown estaba completamente distraído y no frenó ni se desvió para evitar el accidente. Curiosamente, un testigo que llegó a la escena del accidente antes que los policías, aseguró no haber escuchado ninguna película reproduciéndose.
“En Tesla, la seguridad de nuestros clientes es lo primero, y apreciamos la exhaustividad del informe de NHTSA, así como sus conclusiones”, dijo la compañía en una breve nota publicada en su blog oficial.
El cofundador y CEO de Tesla, Elon Musk, ha defendido públicamente el piloto automático desde que el accidente saltó a las noticias, y ha enfatizado que el sistema está diseñado para hacer que la conducción sea más segura y salve vidas. En su cuenta de Twitter, dijo que la investigación de la NHTSA no hace más que confirmar sus declaraciones.
“Los datos muestran que la tasa de accidentes de los vehículos Tesla cayó en casi un 40 por ciento después de la instalación de su sistema Autopilot“, escribió la NHTSA en su informe final.
