McLaren acaba de publicar la receta con la cual han “cocinado” el superdeportivo más potente en sus 55 años de historia. Bautizado así en honor al icónico piloto de Fórmula 1 Ayrton Senna, la impresionante lista de ingredientes promete una experiencia para saborear en las pistas de carreras o carreteras públicas sin demasiados controles policiales de velocidad.
Si vas a hacer un estofado, primero debes elegir bien la olla. En opinión de McLaren, el mejor recipiente para el McLaren Senna es un chasis de fibra de carbono Monocage III rodeado de paneles de fibra de carbono. Así, desde el primer momento ya sabrás cuatro cosas: el automóvil será rígido, fuerte, relativamente liviano… y muy caro. Cada vez que se agrega fibra de carbono a una lista de características, también se suele agregar —al menos— un decimal al precio final. Es así.
McLaren configuró el Senna para que mantenga el control y el equilibrio del chasis a velocidades de cohete con una suspensión RaceActive Chassis Control II obtenida de la competencia, una dirección electrohidráulica, frenos de cerámica de carbono y neumáticos de pista aprobados para su uso en las calles y autopistas públicas.
McLaren puso en el Senna un motor V8 de 4.0 litros twinturbo en el medio del automóvil. El motor ofrece lo que McLaren afirma que es un «rendimiento salvaje», con 789 caballos de fuerza y 590 libras-pie de torque. Con tracción trasera, un motor de medio chasis y toda esa fibra de carbono, el Senna de 2,641 libras está configurado para dar una experiencia en pistas y carreteras que la mayoría de los conductores jamás podrían experimentarán.
Lo cierto es que estas figuras se ven impresionantes en el papel, pero no sólo ahí. En rigor, hacen que el McLaren Senna sea el auto legal “callejero” más poderoso jamás construido por McLaren, lo cual no es poca cosa cuando se observan los otros modelos fabricados en el currículum de la compañía. En la pista, este V8 es el responsable de un sprint de 0 a 62 mph de 2.8 segundos, además de un tiempo de cuarto de milla de 9.9 segundos y una velocidad máxima de 211 mph, casi 340 kilómetros/hora. Los complementos aerodinámicos (los mismos que le dan al modelo una apariencia única) generan más de 1,700 libras de carga aerodinámica a 155 mph, ayudando a los conductores a explotar de forma segura el enorme potencial de rendimiento del Senna, y a no salir —literalmente— volando por los aires al tomar la primera curva.
Con la transmisión de Senna, el conductor puede apuntar al siguiente vértice, apisonar la alimentación de los pies, aferrarse y dejar que la palanca de cambios haga el trabajo en modo totalmente automático. Los conductores que insistan en seleccionar los engranajes por sí mismos pueden usar las paletas montadas tras el volante.
Las puertas de fibra de carbono de Senna se articulan hacia adelante y hacia arriba. McLaren diseñó una amplia abertura de entrada con la puerta levantada y la altura del umbral bajo para acomodar a un conductor y un pasajero completamente vestidos con trajes de carreras y cascos. No pasa mucho en el lado del pasajero, e incluso la estación del conductor está intencionalmente libre de «desorden». No hay botones ni interruptores en el volante de 3 radios, lo que le da al conductor una sensación de una conducción sin obstáculos.
El precio del McLaren Senna 2018 comienza en 750,000 libras en el Reino Unido (incluyendo impuestos), lo que equivale aproximadamente $1 millón de dólares. Los 500 ejemplares comenzarán a entregarse durante el tercer trimestre de 2018, pero, aunque cuentes con el dinero, ya es algo tarde. McLaren asegura que esta edición limitada está ya completamente vendida.
Actualizado el 12 de febrero. Se agrega información completa sobre materiales y rendimiento del motor, así como nuevas fotos y video de la compañía.
