¿Puede uno de los autos más lujosos del planeta salir del estado de Washington? En Godsil Motorcars sin duda lo creen, y tienen toda la intención de probar su valía mediante la fabricación de un extravagante coupé llamado Manhattan.
Claramente, no se trata del Manhattan que pides en el bar de un hotel. Es un coupé extra largo que hace girar las cabeza y que deja al Rolls-Royce Wraith como un modesto y restringido carro para ir al trabajo.
El modelo es como un “hijo de amor mutante” de un Morgan 4/4 y el exclusivo (y único) Maybach Exerelo, concebido en la parte trasera de un concesionario de Rolls-Royce después de unos cuantos Manhattans. Cuenta con acentos de acero inoxidable, sendas aberturas en los guardabarros delanteros, y una parte trasera tipo de bóveda, la cual nos recuerda una lancha.
En Godsil ha querido hacer una toda una declaración de intenciones, por lo que no podían conformarse con comprar un motor V8 a Chevrolet o Ford. Eso sería demasiado mundano. En lugar de eso, prefirieron desarrollar su propio motor con el aporte del ingeniero Stephen Chue. Las especificaciones técnicas aún no las conocemos, pero el Manhattan se pondrá en movimiento gracias a un motor V16 con una potencia aproximada de 1,000 caballos de fuerza.
Si todo sale según lo planeado, el Manhattan se convertirá en el primer automóvil de producción en utilizar un motor V16 desde 1940. Y dejemos esto bien claro antes de que nos lances una pedrada: el Bugatti Chiron utiliza un W16, no un V16. A diferencia de otros motores de 16 cilindros, el Manhattan funcionará con gas natural. La decisión se tomó por razones ecológicas y también patrióticas.
«El gas natural es un 33 por ciento más limpio que la gasolina, y produce una potencia similar», explicó Jason Godsil, fundador de la compañía. Además, “es el combustible de América, lo que significa que si fomentamos su uso en nuestros vehículos, Estados Unidos puede dejar de comprar petróleo de países que no le gustan mucho», agregó.
La gran pregunta es: ¿qué sigue ahora? En un largo comunicado de prensa, Godsil explica que intentó conseguir subvenciones de 48 estados, e intentó obtener parte del fondo masivo de liquidación de Volkswagen, pero fracasó en ambas ocasiones. El Departamento de Energía tampoco estaba dispuesto a ayudar, y las compañías de capital de riesgo se negaron a invertir dinero en el proyecto.
La misma compañía dijo a Digital Trends que actualmente está financiando el proyecto y haciendo un montón de trabajo por su cuenta, pero necesita inversionistas para llevar al Manhattan al siguiente nivel. Una vez que obtenga la financiación que necesita, pasará alrededor de un año para montar el primer prototipo, y entre tres a cinco años más para tener el primer auto de producción regular. El precio está tentativamente establecido en los $650,000.
En última instancia, Godsil planea lanzar una línea completa de carros ultra-lujosos con motores V16. La familia incluirá un sedán de cuatro puertas, un SUV, e incluso un superdeportivo. Suena espectacular, sí… pero el primer y más importante paso es conseguir que el proyecto Manhattan se realice.