Cada motocicleta suele tener una historia tras de sí. Por ejemplo, la australiana Gasoline Motor Company. La que está detrás de esta A-15 —basada en una Harley-Davidson de 1,200cc— es una historia sobre un hombre y su perro.
Gasoline Motors creó la A-15 para un cliente llamado Franky en memoria (tributo) a un cachorro llamado Ángel. Ángel era un Staffordshire Americano adoptado por Franky. Durante 15 años, Ángel se fue con su dueño de caza, de pesca, y merodeó por todos los sitios posibles con Franky a su lado. Después de que Ángel muriera, Franky quiso una motocicleta que honrara el espíritu aventurero de Ángel: su lealtad feroz y su ansiosa disposición por ir a cualquier sitio. Así nació la A-15.
Sabemos muy bien que Harley-Davidson no fabrica motos off-road. Gasoline Motor Company comenzó el trabajo con una Harley 1,200cc “de calle” y la convirtió en una todoterreno excepcional y de alta potencia. La A-15 no tiene semejanza con sus orígenes de moto-crucero, aparte de su motor V-twin altamente reconocible.
Después de quitar de la moto original todo lo que no se necesitaba, Gasoline Motor le añadió unas ruedas con radios y neumáticos todo terreno que no ocultan el propósito para el cual está destinada. El equipo pintó el tanque de gasolina y los paneles laterales con un patrón de camuflaje, así como un «A-15» y un «Gasolina H-D» marcado a mano en los paneles y en el tanque.
Gasoline Motor Company vende motocicletas nuevas y usadas, scooters, sidecars, ropa y accesorios, pero el corazón de la empresa está en sus creaciones personalizadas. Gasoline se refiere a ellas como «nuestra sangre, nuestro sudor y nuestros engranajes».
El equipo enumera muchas de sus creaciones en el sitio web de la compañía. Por supuesto, no todas ellas nacieron a la vida como una Harley-Davidson. Hay BMWs, Hondas, Yamahas, Kawasakis, y otras más. Cada una de ellas tiene un nombre, y la mayoría incluye una historia detrás de su creación.