Muchas autopistas de EE.UU. ya tienen cabinas de peaje automáticas que leen los transpondedores (conocidos también como Tag, o Identificador Automático de Vehículos) colocados en los parabrisas. Pero claro: Audi está llevando (una vez más) las cosas un paso más allá. Ahora, el fabricante alemán instalará los Tags en sus fábrica, por lo que los conductores no tendrán que preocuparse por estropear sus hermosos parabrisas.
El «módulo integrado de peaje» (ITM) de Audi estará integrado en el espejo retrovisor. Fue desarrollado por Gentex Corporation, que también suministra todos los espejos retrovisores con atenuación automática para los automóviles de lujo de Audi. El fabricante afirma que su ITM será compatible con todas las autopistas de peaje en los Estados Unidos, así como en algunas de Canadá y México.
Audi señala que este ITM reducirá el desorden existente en los parabrisas (no es el peor problema al que se enfrentan los conductores, digamos las cosas como son…) y elimina la necesidad de administrar múltiples cuentas para diferentes autopistas de peaje regionales, lo que generalmente se convierte en un problema en viajes largos por carretera. Los conductores pueden usar el sistema de infotainment MMI de Audi para encender o apagar el ITM.
Audi promociona este dispositivo como la última manifestación de la tecnología llamada «vehículo a infraestructura», V2I, término genérico para la tecnología de las comunicaciones que permite que los automóviles, edificios y, en este caso, las cabinas de peaje, envíen datos de ida y vuelta. Una tecnología relacionada, llamada V2V (vehículo a vehículo) hace lo mismo entre los automóviles.
Los desarrolladores de esta tecnología “originalmente” lo vieron como una forma de aumentar la seguridad de los conductores y pasajeros. Se cree que los automóviles equipados con V2V —algún día— podrían enviarse entre sí advertencias sobre las condiciones peligrosas de las carreteras, o señalar su presencia en las intersecciones y otras áreas en donde la visibilidad podría verse comprometida. Continental probará una «intersección inteligente» en Columbus, Ohio, que utiliza la tecnología V2I para mejorar la seguridad de los peatones.
El ITM de Audi tiene menos que ver con la seguridad y más con la comodidad. Pero la conveniencia es muy rentable, por lo que es posible que las empresas desarrollen otros usos para la tecnología V2I en esta línea. La capacidad tecnológica para leer la ubicación de un automóvil y vincularlo a un sistema de pago digital presenta enormes oportunidades para la comercialización. La pregunta es si estos nuevos usos serán realmente valiosos para los conductores, y no serán solo alguna otra distracción tecnológica creada para la generación de nuevas fuentes de ingresos para las empresas que las impulsan.