Puede que —en general— China no esté muy interesada en tener a las compañías tecnológicas estadounidenses metidas dentro de sus fronteras, aunque las cosas parecen cambiar cuando se trata de fabricantes de automóviles.
Ayer jueves 7 de diciembre, el gigante tecnológico chino Alibaba firmó un acuerdo con Ford, con sede en Detroit, «para explorar la cooperación en áreas como la computación en la nube, la conectividad y el comercio minorista», según un informe de Reuters. Como resultado de este acuerdo, los autos de Ford pronto se podrán vender en la plataforma de comercio electrónico de Alibaba, Tmall.
Si bien los detalles sobre este nuevo acuerdo aún son escasos, parece que la llamada colaboración estratégica busca dar a Ford una forma más directa de llegar a los clientes chinos. Después de todo, China está emergiendo rápidamente como líder en la industria automotriz, centrándose en tecnologías de próxima generación como vehículos eléctricos y autónomos. De hecho, está previsto que esta alianza dé como resultado la venta de 15 modelos eléctricos o híbridos en China para el año 2025.
«El acuerdo tiene como objetivo explorar nuevas formas en que los consumidores compren y posean vehículos, así como también cómo aprovechar los canales digitales para identificar nuevas oportunidades de venta minorista», dijo Alibaba en su comunicado. La compañía también dijo que realizaría un “estudio piloto» de nuevas oportunidades de venta al por menor con Ford.
Esto podría ser muy beneficioso para el fabricante estadounidense, ya que sus ventas han tenido problemas últimamente en el mercado asiático. «China es uno de los mercados digitales más grandes y dinámicos del mundo, y muy avanzados en la innovación de las experiencias en y fuera de línea de sus clientes. Colaborar con los principales jugadores de tecnología es para nosotros fundamental pata revolucionar las experiencias de movilidad de nuestros consumidores», dijo en un comunicado Jim Hackett, presidente y director ejecutivo de Ford.
Ford no es, en todo caso, la única compañía que busca expandir su presencia en China. Hace apenas unos meses, Toyota anunció sus planes para acelerar las iniciativas de vehículos eléctricos híbridos en China. Para 2020, el fabricante espera tener un EV híbrido enchufable disponible para los clientes chinos. Además, en los últimos meses, compañías como General Motors, Volkswagen y Daimler también se han interesado en el mercado de automóviles eléctricos en China.
Como el presidente ejecutivo de Ford, William C. Ford Jr., señaló en Shanghai: «Cuando pienso hacia dónde van los vehículos eléctricos, es claro que China liderará el desarrollo de estos». Y Ford —claro— quiere subirse en este tren.