A pesar de que varias fuentes externas revelaron que el iPhone 12 mini no fue un teléfono demasiado exitoso, Apple se decantó por lanzar una nueva generación. El iPhone 13 mini llegó en compañía de sus fortachones hermanos mayores, los iPhone 13, iPhone 13 Pro y 13 Pro Max, sin tener el más mínimo miedo.
Detrás de ese pequeño cuerpo de solo 5.4 pulgadas y 140 gramos se esconde un dispositivo con potencia y una cámara para saciar al más exigente. Eso sí, no es un teléfono para todos, pues en pleno 2021 cuesta acostumbrarse a una pantalla de dimensiones tan comedidas, en especial si somos acérrimos consumidores de contenido multimedia.
Luego de probar 15 días el iPhone 13 mini (incluso me lo llevé de viaje), te cuento cuáles fueron mis sensaciones y mi experiencia de uso con él.
El tamaño sí importa (en todos los sentidos)
El iPhone 13 mini es pequeño y eso es algo que me encantó en algunas situaciones, pero no en todas. Es una verdadera delicia tener un dispositivo tan diminuto, ya que puedes olvidarte de llevar una mochila o un bolso y dejarlo en tu bolsillo sin que lo notes ni siquiera cuando te sientas. Esto es lo que más me gusta del teléfono, que no pesa y que se puede acoplar en la parte trasera la cartera con Magsafe (es justo de su tamaño).
Sin embargo, esta reducción de tamaño tiene un precio alto a pagar: una pantalla muy pequeña. En lo personal, disfrutar de series o jugar no ha sido una experiencia muy buena con este teléfono, pero repito, es la opinión de alguien que ha usado modelos de iPhone grandes desde sus inicios con el iPhone 6 Plus (5.5 pulgadas en aquel entonces). El teclado también resulta algo pequeño, aunque no tuve problemas con esto; es cuestión de acostumbrarse si antes tenías un teléfono más grande.
El asunto de las dimensiones también sale a relucir al usar la cámara o grabar. Los resultados son buenos, idénticos a los del iPhone 13 (tienen la misma cámara), pero al principio me costaba bastante hacer fotos y grabar con un dispositivo tan pequeño. Nuevamente el motivo es que estoy acostumbrada a utilizar teléfonos de dimensiones mucho mayores, algo que se solucionó después de unos pocos días de uso.
La potencia, que no falte
Si el tamaño es uno de los principales atractivos de este teléfono, su potencia no debería pasar por alto. La experiencia de uso fue impecable sin importar la tarea que realizara con él, solo eché de menos que la pantalla no tuviera la misma tasa de actualización que la de sus hermanos mayores (o al menos 90 Hz), pero en términos generales es un dispositivo sobresaliente.
En cuanto a la autonomía, esto es algo muy personal porque todos usamos el teléfono de manera distinta, pero es cierto que este dispositivo fomenta un uso más esporádico durante periodos más cortos al ser más pequeño, y por ende, menos inmersivo, lo que se traduce en un menor consumo de batería.
Gracias a algunas fuentes externas sabemos que el iPhone 13 mini tiene 2,406 mAh de batería, un poco más que el modelo anterior. Más allá de los datos, mi experiencia con el teléfono fue similar a la que tenía con el iPhone 12, es decir, consigo llegar al día completo sin necesidad de cargarlo, pero no más.
Conclusión
Si me preguntas qué teléfono compacto comprar en 2021 no dudaría ni un segundo en recomendar el iPhone mini debido a su calidad de construcción, potencia y buenas cámaras. Ahora bien, nunca recomendaría este dispositivo a usuarios que pasan muchas horas pegados a la pantalla del móvil jugando o viendo series y películas, pues por un rato es llevadero, pero a la larga es insostenible hacerlo en una pantalla tan limitada.