Una extraña controversia se está viviendo por estos días en Francia, toda vez que una agencia gubernamental de ese país, ordenó la prohibición inmediata de usar iPhone 12 por la alta radiación que provocaría el dispositivo.
La Agencia Nacional de Frecuencias, que supervisa las frecuencias radioeléctricas, así como la exposición pública a la radiación electromagnética, pidió a Apple en un comunicado el martes que «implemente todos los medios disponibles para corregir rápidamente este mal funcionamiento» para los teléfonos que ya se están utilizando.
Las actualizaciones correctivas del iPhone 12 serán monitoreadas por la agencia, y si no funcionan, «Apple tendrá que retirar» los teléfonos que ya se han vendido, según el comunicado del regulador francés.
La agencia, conocida por el acrónimo francés ANFR, dijo que recientemente revisó 141 teléfonos celulares, incluido el iPhone 12, en busca de ondas electromagnéticas capaces de ser absorbidas por el cuerpo.
Dijo que encontró un nivel de absorción de energía electromagnética de 5,74 vatios por kilogramo durante las pruebas de un teléfono en una mano o un bolsillo, más alto que el estándar de la Unión Europea de 4 vatios por kilogramo.
Apple cuestionó los hallazgos y dijo que el dispositivo cumple con todas las regulaciones que rigen la radiación.