Apple podría estar cerca de dar un paso más dentro de las herramientas de salud, en específico, de la salud mental.
De acuerdo con un reporte de The Wall Street Journal, los de Cupertino trabajan en el desarrollo de una tecnología que podría ayudar a diagnosticar la depresión y el deterioro cognitivo. Por un lado, la empresa colabora con la Universidad de California en un proyecto denominado Seabreeze. Esta tecnología utilizarías las cámaras del iPhone para detectar expresiones faciales, y el teclado y los micrófonos del dispositivo para relacionar otros indicadores como la manera de hablar o la velocidad a la que escribimos.
Todos estos datos se combinarían con los registros de salud del Apple Watch como las constantes vitales o el sueño, y con resultados de un cuestionario sobre las emociones de los participantes y sus niveles de cortisol, con el fin de ayudar a detectar de manera anticipada problemas de salud como la depresión o la ansiedad.
Apple también estaría dentro de un proyecto de investigación con la Universidad de Duke, cuyo objetivo es crear un algoritmo capaz de detectar el autismo infantil por medio de la cámara del iPhone.
Por otro lado, Apple se habría asociado con Biogen, una farmacéutica que en 2019 lanzó un estudio en el que demostraba que los usuarios con deterioro cognitivo usaban el iPhone de manera distinta a aquellos completamente sanos.
Según las fuentes consultadas por el Journal, ambos proyectos de investigación aún se encuentran en las primeras etapas de desarrollo y no necesariamente terminarán transformándose en nuevas funciones para los dispositivos de la compañía.