La alineación Volkswagen Passat pronto incluirá un modelo orientado al rendimiento, inspirado en el Concept Passat GT presentado el año pasado, según ha podido saber Digital Trends. Llamado Passat GT, el sedán se unirá a la línea de la compañía alemana a tiempo para ser un modelo año 2018.
Un portavoz de Volkswagen nos ha dicho que el Passat GT será muy similar al Passat GT Concept (fotos) presentado en la edición 2016 del Salón del Automóvil de Los Ángeles. El estudio de diseño se basó en el modelo estadounidense fabricado en Chattanooga, Tennessee, y fue desarrollado específicamente para el mercado norteamericano.
Lo mismo se aplica a la versión de producción. Se espera se diferencie de la variedad Passat por sus tapas de espejo negro, un spoiler en la tapa del maletero y los acentos de color rojo en la parrilla, las cuales hacen eco del emblema GTI. Las llantas de aleación específicas del modelo redondearán las modificaciones exteriores. En el interior, los cambios incluirán un conjunto de asientos deportivos para los pasajeros delanteros.
El Passat GT estará listo para usar un motor VR6 de 3.6 litros de Volkswagen, una unidad sintonizada para bombear (al menos) 280 caballos de fuerza y 258 libras-pie de torque. Una suspensión deportiva más baja mejorará su manejo. El sedán seguirá siendo de tracción delantera. Eso sí, no esperes encontrar el sistema de propulsión 4Motion del Golf R bajo su chapa metálica.
Lo que no sabemos a ciencia cierta es cuándo Volkswagen presentará su Passat GT 2018. Bien podría debutar en las próximas semanas, o bien podría Volkswagen optar por mantenerlo en secreto hasta la próxima edición del Auto Show de Los Ángeles, la cual abrirá sus puertas en noviembre. De cualquier manera, llegará a los concesionarios de todo el país antes de que finalice el año con un precio que rondará los $30,000 dólares.
Mirando hacia atrás
Este no será el primer intento de Volkswagen de poner “esteroides” al Passat. Ya en 1977, los ingenieros pusieron en la bahía de un Passat de primera generación un motor cuatro cilindros de 1.6 litros y 110 caballos de fuerza sacado de un Audi 80 GTE. También instalaron unos frenos más fuertes en ambos ejes para mantener esta potencia bajo control, además de unos neumáticos más anchos y un kit deportivo en su carrocería.
Llamado Passat GTI, el prototipo de dos puertas se puso a prueba en las carreteras que circundaban la sede de Volkswagen en Wolfsburg, Alemania, pero nunca se le dio la luz verde para su producción. Toni Schmucker, jefe de la marca en ese momento, creía firmemente que las palabras «Rendimiento» y «Passat» eran mutuamente excluyentes, para gran consternación de los ingenieros que trabajaban en el proyecto. Por suerte, los tiempos han cambiado.