Un importante avance en hacer más sencillo el proceso de detección de la enfermedad de Alzheimer fue descubierto esta semana, y la idea es volver a poner en el tapete los exámenes sanguíneos.
Esta semana, en la revista Brain, un equipo multinacional formado por investigadores de Suecia, Italia, el Reino Unido y Estados Unidos detalló un nuevo análisis de sangre basado en anticuerpos que desarrollaron recientemente. La nueva prueba puede detectar proteínas tau derivadas del cerebro, que son específicas de la enfermedad de Alzheimer. Después de un estudio de 600 pacientes, el equipo descubrió que su prueba podía distinguir de manera confiable la enfermedad de otras enfermedades neurodegenerativas.
El Dr. Thomas Karikari, profesor de psiquiatría en la Universidad de Pittsburgh y uno de los coautores del estudio, dijo a The Guardian que espera que el avance pueda ayudar a otros investigadores a diseñar mejores ensayos clínicos para los tratamientos del Alzheimer. «Un análisis de sangre es más barato, más seguro y más fácil de administrar, y puede mejorar la confianza clínica en el diagnóstico de Alzheimer y la selección de participantes para ensayos clínicos y monitoreo de enfermedades», dijo.