Un año y medio después del comienzo de la pandemia de COVID-19, las investigaciones al respecto siguen sorprendido. La última noticia es que algunas personas podrían ser genéticamente resistentes a la infección por SARS-CoV-2, el virus causante del COVID-19 que ha acabado con la vida de casi 5 millones de personas en todo el mundo.
De acuerdo con la investigación llevada a cabo por un equipo dirigido por el inmunólogo Evangelos Andreakos de la Academia de Atenas, dos personas son 99.9 por ciento genéticamente idénticas, pero ese 0.1 por ciento determina sus diferencias, desde la apariencia hasta su resistencia o susceptibilidad a enfermedades como el VIH. El estudio genético de estos individuos podría abrir las puertas a cómo tratar potencialmente el COVID-19.
De momento, la información sobre esta resistencia innata es bastante escasa, pero hay evidencias de su existencia. Según los investigadores, a veces se pueden infectar hogares enteros y solo uno de sus miembros esquiva la infección e incluso algunos informes indican que ciertas personas han sido capaces de no contagiarse incluso después de estar en primera línea de fuego varias veces. Estos sujetos podrían ser clave en el desarrollo de sistemas de inmunidad futuros.
El equipo ya ha comenzado a investigar con individuos que, en apariencia, presentan inmunidad endógena a la enfermedad. “Ya hemos inscrito a más de 400 personas que cumplen los criterios de inclusión en estudio de cohorte de resistencia”.
Los investigadores abrieron un proceso de preinscripción colaborativa para participar en el estudio al que cualquier persona del mundo que quiera puede presentarse como voluntaria.