Jueves 24 de junio de 2010. Apple lanza de manera oficial el iPhone 4 en Estados Unidos. El dispositivo había sido presentado días antes en el evento de desarrolladores de la compañía (WWDC) realizado en el Moscone Center, en San Francisco.
Aquel evento estuvo marcado por la presencia de Steve Jobs, quien ya lucía los estragos del cáncer en su cuerpo. El cofundador de Apple se veía extremadamente delgado y su apariencia causó una profunda preocupación.
Así, el iPhone 4 se convirtió en el último presentado por Jobs, quien fallecería en octubre de 2011 a causa de esta agresiva enfermedad. De hecho, el empresario murió un día después de la aparición del iPhone 4S.
Como era costumbre, el teléfono inteligente que presentó Apple en 2010 funcionaba con iOS. Hasta ese día, el sistema operativo se llamaba iPhone OS, pero su nombre cambió con la llegada del nuevo dispositivo.
El iPhone 4 era un smartphone 3G con pantalla táctil y seguía los pasos del iPhone 3G. Se comercializaba para realizar videollamadas (FaceTime), consumo de medios de comunicación como libros, revistas, películas, música y juegos, y para la web en general.
Uno de sus puntos más destacados era el diseño, que incorporaba un marco de acero inoxidable no aislado que servía y actuaba como antena del dispositivo.
El iPhone 4 tenía un procesador Apple A4 y 512 MB de DRAM, el doble que el modelo anterior y cuatro veces más que el iPhone original.
Locura en Japón
Como es costumbre, el lanzamiento de este iPhone despertó gran expectación a nivel mundial. Miles de personas se congregaron en las tiendas de Apple repartidas en Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania y Japón para poder adquirir este nuevo teléfono.
Un artículo publicado el 24 de junio de 2010 por la BBC da cuenta de la locura desatada entre los fanáticos japoneses que aguardaron por horas afuera de los locales que distribuían el iPhone; algunos de ellos incluso pasaron la noche en la calle.
Una situación similar se vivió en el Reino Unido, sobre todo en la tienda principal de Apple en Londres, donde cientos de usuarios llegaron 24 horas antes del lanzamiento para quedar más cerca del ingreso al local, lo que demuestra una vez más la locura que puede desatar este popular dispositivo de Apple.