Immortals Fenyx Rising te brinda múltiples opciones para moverte dentro de su mapa y una de las más eficientes es utilizando una montura. Los caballos o ciervos del juego de mundo abierto tienen su propia barra de resistencia, independiente del personaje principal. Sin embargo, hay un grupo de monturas clasificadas como épicas, que ofrecen una barra de resistencia está triplicada.
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Estos animales especiales lucen de una manera distinta y es posible encontrarlos solitarios en lugares muy específicos del mapa. Pueden llegar a ser más difíciles de domar que un animal cualquiera y se asustan muy rápido al acercarse, además de que en ocasiones el terreno mismo donde están ubicados no resulta de mucha ayuda, pero con algo de paciencia no habrá problemas para domarlos a todos.
A continuación, algunas indicaciones sobre cómo llegar a los lugares dónde están las nueve monturas épicas de Immortals Fenyx Rising.
Laurión
Este caballo alado aparece en la zona inicial del juego y es posible obtenerlo durante las primeras horas, aunque dada su ubicación (y la relativa baja capacidad de resistencia del personaje al comienzo), tampoco es mala idea esperar un poco antes de ir por él.
Laurión está en una pequeña playa en las islas de la parte inferior del mapa; hay que acercarse lentamente y con cuidado (idealmente rodeando las paredes cercanas), ya que el terreno es plano y no hay lugar donde esconderse.
Una vez domado, aparecerá en el inventario y se podrá seleccionar como montura predeterminada al llamar a una montura con el botón Y o triángulo, dependiendo de la consola que utilicen. Lo mismo ocurre para todo el resto de monturas conseguidas, ya sean épicas o de las normales.
Tiro
Tiro es un unicornio rosado que está en la parte sur del Valle de la Eterna Primavera. Esta montura también se puede conseguir en las primeras horas de juego –incluso puede ser el primero que se obtenga– y, al igual que con Laurión, domarlo es relativamente fácil.
Tiro se encuentra en el lugar indicado por el ícono rojo en el mapa. Y la única precaución antes de domarlo es haber limpiado enemigos del lugar cercano, si es que hubiera alguno, ya que al comenzar el juego hasta el gallo más inofensivo nos puede hacer pasar un mal rato.
Índica
Otro unicornio, aunque ahora de color celeste (o azul). Al igual que Tiro, este también se encuentra en el Valle de la Eterna Primavera y debiera ser de los primeros a obtener; probablemente, lo encontremos al recorrer el sector camino a una misión.
Índica se encuentra en la parte más al norte de la zona (específicamente, en Alma de Gea) en lo que parece una laguna. Si bien no hay terreno donde esconderse para no asustarlo, el proceso tendría que ser relativamente fácil.
Etón
Etón debe ser el caballo más impresionante de todo el grupo: literalmente, es un caballo que está en llamas. Y tanto así, que acceder al área en la que aparece no es tan sencillo, ya que primero hay que completar una misión para eliminar la corrupción de la zona.
Pero una vez cumplido el requisito, solo hay que rodear la estructura del Fuerte de Áyax y llegar a él en el lugar que se indica en el mapa (nótese que el viaje rápido hacia el lugar nos deja en la entrada del fuerte, no en el centro como indica el ícono).
Una vez en el lugar, Etón no es nada complejo de domar y más todavía si se tiene la habilidad de hacerse invisible.
Parangón
Parangón es un bonito caballo con armadura metálica que se encuentra en el límite sur entre Tierraforja y la Guarida de la Guerra. De partida, y solo por su ubicación, deben saber que para acceder a esta zona relativamente sin problemas es buena idea haber avanzado en misiones principales y tener al personaje ya con algunas mejoras básicas relacionadas a potencia de ataque y barra de salud, ya que los enemigos cercanos son más poderosos que las áreas iniciales.
Dicho lo anterior, no tendría que ser un problema domar a Parangón, al igual que con las monturas anteriores. Simplemente hay que acercarse lento y sin hacer ruido (si ya tienen la habilidad para hacerse invisible, mejor aún) y luego de un pestañeo, Parangón aparecerá en el inventario.
Anticítera
Anticítera es una especie de caballo robótico, tal como todas las máquinas que se ven por Tierraforja. Coincidencia o no, es uno de los que parecen más complicados de domar, ya que además de no haber muchos lugares para esconderse, se asusta bastante más fácil que el resto de monturas épicas mencionadas hasta ahora.
Anticítera está en la parte norte de Tierraforja y si bien esta área está libre de enemigos, lo recomendable es haber subido de nivel de armas, además de haber aumentado la barra de salud y resistencia. Tierraforja es una de las áreas más hostiles del juego, por lo que no parece buena idea ir a buscar a Anticítera sin estar preparado.
Guardián
Guardián es otro caballo alado y completamente dorado que se encuentra en la parte norte de la Arboleda de Kleos. Hallarlo es relativamente fácil, ya que se encuentra hacia el final de un camino que termina en un puente cortado, justo al lado de un acantilado, y para llegar al él, solo hay que seguir la ruta desde el sur que se indica en la foto.
Guardián es fácil de domar, siempre y cuando nos acerquemos con calma y sin hacer ningún movimiento que haga saltar el signo de interrogación rojo sobre su cabeza; si eso ocurre, arrancará y habrá que comenzar el proceso de nuevo. De todas maneras, con la habilidad de hacerse invisible no tendría que haber problema para agregar a Guardián al inventario.
Asfódelo
De todas las monturas épicas, Asfódelo es el único que no es un caballo o mejor dicho, que está basado en la anatomía de un caballo. No, este Asfódelo es un ciervo épico y será uno de los últimos a conseguir, ya que se encuentra en Cima del Rey, una de las zonas “finales” del juego.
Las misiones de Cima del Rey recién se abren al haber recuperado las esencias de los cuatro dioses, pero de cualquier manera se puede acceder al área antes de tiempo, si tienen la barra de resistencia suficiente. Una vez aquí, Asfódelo se encuentra en la zona sureste del mapa (indicada en la foto) y aún sin haber limpiado la niebla del lugar, su acceso es relativamente sencillo y con la habilidad de hacerse invisible, domarlo no será problema.
Ptilon
El último de las monturas épicas de Immortals Fenyx Rising está en Cima del Rey y es probablemente la que requiera haber avanzado en la historia hasta ese punto, ya que el camino más sencillo se abre al completar la misión Emergencia Familiar.
Ptilon es un caballo alado con plumas multicolor y se encuentra en una pequeña planicie congelada en medio de la montaña. Domarlo no es nada complicado a estas alturas y menos todavía si se tiene la habilidad para hacerse invisible; además, no hay enemigos alrededor que molesten o sean una distracción. Pero claro, llegar a esta zona es más factible después de unas cuantas decenas de horas de juego.
Y con Ptilon en el inventario, se ha completado la captura de las nueve monturas épicas del juego. Cabe mencionar que existe un logro o trofeo llamado Desmontando a Fenyx, que se consigue dominando todas las monturas del juego, ya sean épicas o comunes.
