Los expertos dicen que no es canibalismo. A nosotros nos genera dudas. Lo otro que no entendemos es por qué alguien lo hizo; por qué alguien pensó que era una buena idea crear un bistec humano con carne de nuestro propio cuero y cultivada por nosotros mismos.
Recibe el nombre de filete de Ouroboros, por aquella antigua serpiente egipcia que se come a sí misma, y se puede cultivar a partir de células obtenidas del interior de nuestras mejillas y alimentarse con suero de sangre vieja donada.
Este llamativo invento ha sido desarrollado por un grupo de científicos y diseñadores de Estados Unidos, quienes ofrecen también una especie de kit al estilo de “hágalo usted mismo”.
Por ahora, el bistec humano se trata sólo de un prototipo y en estos momentos está diseñado como una obra de arte que invita a la reflexión. De todas formas sus desarrolladores explican que, efectivamente, es una pieza de carne obtenida de células humanas.
Quienes están detrás de este proyecto quieren generar debate en torno a la excesiva dependencia de la industria de la carne y, en el último tiempo, de la industria de la carne cultivada en laboratorio del suero fetal bovino o FBS, lo que está asociado a un negativo impacto en el medioambiente y en la vida de los animales.
«El suero bovino fetal cuesta cantidades significativas de dinero y la vida de los animales», señaló el diseñador y científico de Ouroboros Steak, Andrew Pelling.
Los encargados han creado el filete humano de Ouroboros sin la utilización de FBS, como una forma de demostrar la posibilidad de crear carnes cultivadas en laboratorio sin causar daño en los animales.
En otras palabras: ellos se propusieron generar debate y un espacio para la reflexión y vaya que lo han logrado.