Al igual que en la década del 60, la Luna será nuevamente el objetivo de una carrera espacial, pero ahora comercial.
Este jueves la empresa Masten Space System anunció que, en 2022, SpaceX será la encargada de transportar hasta el satélite natural su vehículo alunizador XL-1, aunque no confirmaron la fecha exacta, informó Hipertextual.
Al parecer, el rimbombante éxito del transporte de astronautas culminado por el Crew Dragon el 2 de agosto de 2020 sigue dando réditos a la empresa de Elon Musk.
La misión a la Luna es parte del programa Commercial Lunar Services (CLPS) de la NASA. En este marco, la agencia espacial estadounidense seleccionó en abril el vehículo alunizador de Masten.
De acuerdo con la información entregada por esta última, el vehículo de lanzamiento de SpaceX pondrá la nave espacial en la órbita lunar, y una vez allí “el XL-1 disparará sus cuatro principales motores para reducir la velocidad y descender de forma autónoma mediante un alunizaje suave”.
Masten agrega que el XL-1 “entregará cargas útiles en el polo sur de la Luna, que es rico en recursos”. O sea, transportará instrumentos científicos y cargas de las empresas que estén dispuestas a pagarlo.
Como apuntan en TechCrunh, este lanzamiento será fundamental para el Programa Artemisa de la NASA que contempla el regreso del hombre a la luna y la llegada de la primera mujer para el año 2024.
Por el momento solo hay cuatro misiones de alunizaje planificadas bajo CLPS, incluido el lanzamiento del módulo de aterrizaje Peregrine de Astrobotic en junio de 2021, el Intuitive Machines en octubre de 2021, Masten en diciembre de 2022 y Viper de Astrobotic cuyo modulo Griffin debiera llegar a la luna en 2023.
Hipertextual recuerda que tanto la agencia estadounidense como la Agencia Espacial Europea (ESA) quieren que las empresas privadas construyan la primera base lunar.
Además, esperan que tanto la base como el orbitador lunar sirvan de plataforma para la llegada del hombre a Marte en el año 2030.