Un informe del Centro Nacional de Seguridad Cibernética (NSCS, por sus siglas en inglés) impulsaría al gobierno del primer ministro británico, Boris Johnson, a modificar su política en torno al rol de la empresa china Huawei en la implementación de la infraestructura de redes 5G en el Reino Unido. Sin embargo, las empresas del sector advirtieron que si la medida se impone para 2023 el país podría sufrir un «apagón tecnológico».
El secretario de Estado en materia Digital, Cultura, Medios y Deportes, Oliver Dowden, confirmó el día lunes 6 de julio que las autoridades recibieron un informe sobre Huawei elaborado por el NSCS, organismo dependiente del Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ, por sus siglas en inglés), uno de los tres servicios de inteligencia británicos.
«Lo estamos examinando y entendiendo sus implicancias», afirmó Dowden, en declaraciones recogidas por Radio 4 de la BBC. Según la cadena británica, el NCSC habría informado que no es posible garantizar la seguridad de los productos de Huawei, debido a las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos en mayo de 2020.
Evitar vulnerabilidades
Antes de conocer las conclusiones del informe, el primer ministro Johnson había ratificado el lunes 6 de julio su decisión de impulsar las redes 5G, pero también enfatizó que cualquier medida que adoptara debe velar por la seguridad del país. “Estoy determinado a que el Reino Unido no debería ser vulnerable, de ninguna manera, a un proveedor estatal de alto riesgo, por lo que debemos pensar cuidadosamente cómo manejamos eso”, deslizó.
Los rumores sobre un posible endurecimiento del Reino Unido cobraron fuerza el fin de semana del 5 de julio , luego de que informes de los diarios The Sunday Times y The Daily Telegraph apuntaran a que el gobierno de Johnson prohibiría la compra de equipos Huawei 5G a fines de 2020.
El embajador chino en el Reino Unido, Liu Xiaoming, advirtió inmediatamente que, de confirmarse estos reportes, se estaría enviando un mensaje negativo a las empresas del país asiático.
Apagón tecnológico
Algunos parlamentarios conservadores estarían promoviendo que el eventual veto a Huawei se implemente en 2023, antes de las elecciones generales de 2024, un plazo que es visto con recelo en dos de las empresas más importantes del sector, Vodafone y BT, que utilizan productos chinos en sus redes.
El director de Tecnología e Información de BT, Howard Watson, advirtió el jueves 9 en la BBC que «llegar a cero en un período de tres años significaría, literalmente, apagones para los clientes con 4G y 2G, así como 5G, en todo el país», porque esto implicaría reemplazar equipos en varios lugares de forma simultánea.
En el mismo sentido, ndrea Dona, directora de redes de Vodafone UK, sostuvo que los clientes podrían perder su señal durante un par de días, dependiendo del trabajo que se deba realizar. «Un tiempo de transición de cinco años sería el mínimo. Un mínimo de cinco años, idealmente siete», sostuvo.
Ambas empresas utilizan equipos de Huawei en todas sus redes, con excepción de BT que para las redes 3G cuenta con el soporte del kit de Nokia.
«¿Quién dicta las políticas?»
En un tono más duro, el jefe de Medios Internacionales de Huawei, Paul Harrison, lanzó el domingo 5 de julio una serie de interrogantes a través de Twitter: “¿Las políticas del Reino Unido están siendo dictadas por la administración de Trump? ¿El Parlamento Europeo reemplazado por la Casa Blanca?”.
1/6 Important, in my view, to underline what’s going on here:
• USA has no major global stake in 5G
• Get one: supress Huawei chip supply
• This forces UK Gov to assess impact
= UK policy is being dictated by Trump administration. European Parliament replaced by White House? pic.twitter.com/pVmTV2Hwxb— Paul Harrison (@HarrisonComms) July 5, 2020
En enero de 2020, el Reino Unido le había otorgado a Huawei un papel limitado en sus futuras redes 5G. Según declaró entonces el gobierno de Johnson, los servicios de la firma china serían usados para elementos «no centrales» de la red y brindaría solo el 35 por ciento del suministro. Sin embargo, tras las sanciones estadounidenses de mayo pasado, el NCSC comenzó a estudiar su impacto en la seguridad local.
* Artículo actualizado el 9 de julio con reacciones de empresas del sector