Si planeas enviar o recibir un paquete con juegos a través del correo, tal vez después de leer esta historia decidas considerar un servicio que no sea el Servicio Postal de los Estados Unidos.
Un coleccionista e historiador de videojuegos ordenó 100 juegos del Super Nintendo Entertainment System por un valor de $10,000 dólares, pero nunca recibió el envío. Peor aún, la explicación de USPS lo dejó con más preguntas que respuestas.
El historiador, que es conocido por el pseudónimo de Byuu, estaba trabajando con otro coleccionista en Frankfurt para archivar un lote de los juegos europeos PAL SNES en archivos ROM. El paquete de 100 cartuchos partió sin problemas desde Alemania, pero una vez que llegó a los Estados Unidos las cosas se complicaron, y el paquete nunca pudo ser localizado.
Byuu dijo que estuvo en contacto con USPS, y después de varios intentos, finalmente recibió una vaga evidencia de lo que podría haber sucedido cuando USPS envió a Byuu una pieza rota del paquete original, con la etiqueta de envío intacta, junto a una carta de disculpa.
USPS afirma en la carta que el paquete fue dañado a través de «procesamiento normal de la máquina» en sus instalaciones, pero el historiador no está conforme con esta simple disculpa. «Básicamente, la carta afirma que la máquina de USPS se comió mi paquete y arrancó la etiqueta, que enviaron de vuelta en un sobre sin el paquete ni los juegos. Al ver esto, ayer por la noche, bastante enojado, publiqué mi opinión sobre esto y presumí que era un robo flagrante. Aunque todavía no me siento bien al respecto, la verdad es que no puedo saber con certeza lo que realmente sucedió, pero las circunstancias son intensamente sospechosas. La parte superior e inferior de la etiqueta está cortada de una manera limpia, lo cual hace que no parezca probable que el paquete haya sido abierto por una máquina», dijo Byuu en un comunicado a Destructoid.
USPS ha abierto una investigación interna para tratar de averiguar qué sucedió. En cuanto al coleccionista de Frankfurt, Byuu ha creado un Patreon para recaudar dinero en un intento de reconstruir la colección.