Sin embargo, aunque el teléfono puede que no sea el mejor en cuanto a rendimiento, cuenta con una pantalla que habría que destacar.
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Según DisplayMate, la pantalla del iPhone 7 es la «mejor pantalla LCD» que se ha probado, con una mejora importante respecto al iPhone 6.
Esta afirmación se produce a raíz de una serie de pruebas y mediciones llevadas a cabo. Las pruebas realizadas revelan que el iPhone 7 tiene la mayor proporción de contraste, brillo, y la reflectancia más baja de cualquier pantalla de un smartphone.
Todo ello hay que tenerlo en cuenta, sobre todo con el gran número de teléfonos inteligentes con pantallas OLED. Los fabricantes están apostando, cada vez más, por las pantallas OLED porque muestran mejores colores y unos negros más profundos.
Pero, ¿por qué es la pantalla del iPhone 7 tan grande? Para empezar, cuenta con dos gamas de color en comparación con el iPhone 6.
En concreto, se trata de una gama de color estándar que se utiliza en los teléfonos inteligentes, mientras que la otra es un 26% más grande y es el espectro utilizado en televisores 4K. El teléfono elige entre estas gamas cuando es necesario para que los colores se muestren con la mayor precisión.
Apple ha sido criticada tras apostar por las pantallas LCD en lugar de por las OLED, en gran parte debido a que las pantallas LCD consumen mucha más energía de la batería. A pesar de esto, el iPhone 7 demuestra que la pantalla LCD sigue ofreciendo una poderosa tecnología y tal vez Apple haya tomado la decisión correcta después de todo.
Aún así, añadirle un poco más de vida a la batería sería bueno y hay algunas áreas donde falla la pantalla del iPhone 7. Por ejemplo, la pantalla ofrece una resolución mucho menor que muchos otros teléfonos en el mercado y los críticos argumentan que Apple va con retraso en la adecuación de las resoluciones ofrecidas por los teléfonos Samsung.
