Motorola tuvo una idea poco convencional para probar las capacidades de durabilidad y cámara de sus celulares estrellas, el Motorola Razr 50 Ultra y el Motorola Edge 50 Ultra. Junto a Corning, líder en tecnología de cristal, la compañía se embarcó en un viaje único al Polo Norte.
Motorola siguió a Po Ki Yuen, un ingeniero de Corning recientemente jubilado y aficionado a la fotografía de aventura, en su viaje a uno de los entornos más remotos y desafiantes de la Tierra. La expedición al Polo Norte fue más que una aventura: fue una prueba real del rendimiento de estos dispositivos de última generación en condiciones extremas. Los elegantes smartphones de Motorola, equipados con cristal Corning Gorilla Glass excepcionalmente resistente, se sometieron a la prueba definitiva durante este viaje: el impredecible clima del Ártico.
“Hay belleza en todo el planeta, incluso en las condiciones más adversas. Quiero capturarla toda”, afirma Po Ki. “El Polo Norte no sólo era un entorno físicamente adverso, sino que la lejanía también me suponía un reto mental. Tenía muchas ganas de poner a prueba estos dispositivos y Gorilla Glass”.
“A lo largo de los años, los materiales avanzados de Corning han desempeñado un papel fundamental a la hora de ayudar a Motorola a ofrecer smartphones que no solo combinan resistencia y estilo, sino que también están fabricados para durar”, afirma Rubén Castaño, vicepresidente de Diseño y Experiencia del Consumidor de Motorola. “Esta última colaboración en el Polo Norte es un testimonio de los valores compartidos de nuestra asociación, ya que ampliamos los límites de lo que es posible cuando se trata del rendimiento de nuestros dispositivos incluso en los entornos más extremos”.
Además de probar la durabilidad de los dispositivos, Po Ki aprovechó la tecnología de su cámara para capturar los impresionantes paisajes y la vida salvaje. Por ejemplo, el motor de mejora automática de fotos (Photo Enhancement Engine) permitió capturar sin esfuerzo fotos perfectas en cada toma. Sin necesidad de experiencia personal, utiliza la IA para aplicar simultáneamente los ajustes de varios modos de captura en uno solo para ofrecer la máxima calidad. Desde magníficas fotos y videos de paisajes en alta resolución hasta primeros planos de osos polares, Po Ki fue capaz de ajustar cada imagen para obtener un nivel óptimo de detalle, claridad, luces, sombras, color y bokeh, transmitiendo a la perfección la inmensidad y serenidad del Ártico.