Nunca jugué Super Mario Galaxy ni su secuela, así que digamos que soy un entusiasta de la idea de festejar el 40 aniversario de la serie con alguno de estos juegos. Revisé Wikipedia y bueno, Super Mario Galaxy es un juego de hace 18 años, mientras que Super Mario Galaxy 2 tiene 15 años. Muchas cosas han pasado en la industria de los videojuegos en 15 años, pero si dejas de lado el wikipediazo de cada uno de ellos y no eres particularmente observador en el apartado gráfico, ambos juegos lucen sumamente frescos en pleno 2025, así que si te sobran $1,599 pesos o $69.99 dólares, aquí tienes dos fantásticos títulos de Super Mario.
Que no haya jugado ninguno de estos juegos en su momento no significa que esté totalmente alejado de los Mario tridimensionales de los últimos años. Jugué muchísimo el fantástico Super Mario 3D Land (el director es Koichi Hayashida, quien también dirige Super Mario Galaxy 2), así que en esta reedición encontré más de los fantásticos niveles de plataformas que gocé hace varios años en mi Nintendo 3DS.

Si esta será tu primera experiencia con un Mario 3D —algo que se antoja poco posible—, espera una buena cantidad de niveles que requieren saltos precisos y curiosidad para encontrar cada una de las estrellas y pasajes secretos, además de peleas contra jefes que quizá te exijan más de lo que posiblemente esperarías en un juego de Super Mario. A veces estos niveles son esferas de las que tendrás que explorar toda su superficie en busca de una llave, a veces tendrás que explorar su interior; otras serán cubos que repiten la fórmula de las esferas; a veces serán niveles escenarios bidimensionales. Por ejemplo, muy al inicio de Super Mario Galaxy 2 hay un nivel (“Breaking the laws of gravity”) en el que prácticamente todo el tiempo juegas de cabeza y, literalmente, caes hacia arriba. Sea cual sea el caso, creo que nunca sentirás hastío sino más bien, ganas de volver a jugarlos para sumar más estrellas a tu cuenta.

El paquete incluye dos juegos completos, cada uno con aproximadamente 50 niveles, y aunque el precio pueda ser un muy justificado foco de polémica, hay mucho por jugar en Galaxy y Galaxy 2.
Igual, mi principal elogio a Super Mario Galaxy y Super Mario Galaxy 2 es que aun con la arregladita gráfica que dio Nintendo a cada título, ninguno se siente viejo. Hasta ahora he jugado más Galaxy 2 porque descubrí a la mala que Galaxy no tiene una función de autoguardado, y aunque si miras a detalle el apartado gráfico vas a verles el bótox, ambos títulos tienen una esencia muy contemporánea y eso solo habla de lo bien que están hechos. Sí, hay cosas que me parece que la reedición pudo haber mejorado, como añadir una cámara libre en la gran mayoría de las situaciones tridimensionales —hay escenarios donde una cámara libre ayudaría mucho a darle un toque de majestuosidad— o dar otras opciones a los controles de movimiento cuando juegas en modo portátil (porque temí una tragedia cuando agité mi Switch 2 mientras esperaba mesa para cenar), pero aún con estos detalles, Super Mario Galaxy y Super Mario Galaxy 2 permanecen como joyas del género de plataformas, así que, si como yo, no los jugaste en su momento, lo más probable es que acabes fascinado si les das una oportunidad.