A muchos les encantan los videojuegos deportivos, y también las buenas historias. Y tal vez te preguntes por qué algunos de los juegos deportivos más populares se alejan de contar buenas historias.
No hay escasez de películas y series que demuestran que los vínculos que puede forjar un deporte son el material perfecto para historias que atrapen a la audiencia. Los estudios lo saben, pues cada año, películas de gran presupuesto con temas deportivos llegan a la pantalla grande, a menudo respaldada por un elenco estelar que garantiza al menos una nominación a los Premios de la Academia.
Por su parte, los principales nombres en el mundo de los videojuegos deportivos, Madden, FIFA, NBA 2K y MLB The Show, han comenzado recientemente a explorar el papel de las historias, con diversos grados de éxito. Y, después de haber jugado estas campañas deportivas basadas en historias, en Digital Trends hemos llegado a una sorprendente conclusión: Cuanto menos juego haya dentro de la historia, mejor.
Una historia sin historia
Longshot: Homecoming de Madden NFL 19 fue la versión que nos hizo pensar en la verdadera importancia de una buena historia dentro de un videojuego. Elegimos Longshot de Madden 18 como nuestro juego favorito del 2017 en el resumen de fin de año de Digital Trends. Todavía nos encanta el original, pero la decepción con la que nos encontramos en Homecoming de Madden 19 nos ha obligado a volver a pensar por qué estábamos tan enganchados con su predecesor.
Longshot: Homecoming continúa la historia de los mejores amigos Devin Wade y Colt Cruise. Desde el inicio está llena de eventos improbables, escritos de forma transparente para atraer las fibras del corazón del jugador, pero no logran su objetivo. Sin embargo, nuestro mayor problema con Homecoming no son las extrañas coincidencias que guían la historia de Colt, o la caracterización de Devin Wade. Nuestro problema es el juego. Es mucho e innecesario.
¿Por qué una Cancha Virtual?
Aparentemente, EA Sports aumentó el tiempo dedicado a una ‘cancha virtual’ en respuesta a los comentarios y sugerencias de muchos de sus jugadores. «Una de las peticiones más comunes era que los jugadores querían sentirse más involucrados con Longshot desde una perspectiva de juego. Con eso, esta temporada los jugadores encontrarán cuatro veces más oportunidades de juego, y se verán involucrados en más acciones en la cancha», escribió EA en una publicación de su blog.
«Cuatro veces más juego» suena genial a simple vista, pero no todo lo que brilla es oro.
«Cuatro veces más juego» suena genial a simple vista, pero no todo lo que brilla es oro. En la práctica, los largos tramos de Madden hacen que la débil historia sea menos relevante aún. Mientras que Longshot presentaba largas escenas cinemáticas y mucho diálogo, Homecoming se mueve de algunas escenas recortadas hacia largos partidos de fútbol, 11 contra 11, que apenas difieren de un partido de exhibición estándar.
Sin duda, Homecoming es más divertido que Longshot, porque hay más juego involucrado. Sin embargo, Longshot fue nuestra experiencia favorita de videojuegos del 2017, mientras que Homecoming es una de las versiones del 2018 que menos gustan hasta el momento. ¿Por qué? Porque jugar Madden NFL 19 no tiene nada que ver con la historia.
Una serie de puntos débiles
Homecoming se centra en los protagonistas que mencionamos, sin embargo, el juego te permite controlar a todo un equipo. Eso significa que nunca hay una posibilidad de sorprender al jugador, o de tener un impacto significativo en la historia mientras el juego se está ejecutando.
La historia está obligada a unirse de alguna forma, mientras intenta hacer que los resultados de cada partido se alineen con las cinemáticas que la sostienen. Los puntos débiles son más obvios cuando pierdes. Si bien puedes repetir un juego varias veces para ganar, la historia anuncia la victoria como si no fuera gran cosa, y de repente, las cuerdas de la historia se vuelven obvias. Te das cuenta de que el juego que estás jugando, y la historia que te cuentan, no están conectados.
Mientras que Homecoming no aprovecha su éxito anterior, sigue una fórmula que se encuentra con bastante frecuencia en otros juegos. Por ejemplo, The Neighborhood de NBA 2K18, y The Show’s Road to the Show de MLB, están diseñados para seguir el sueño de toda una vida de jugadores de practicar deportes profesionales. Ambas campañas ofrecen una forma diferente de jugar basquetbol y béisbol desde la perspectiva de un jugador en lugar de la de un equipo, pero las historias en cada uno dejan mucho que desear.
¿Somos los únicos que esperamos una buena historia?
Lo cierto es que Longshot: Homecoming, la segunda temporada del nuevo modo de historia cinematográfica presentado por Madden NFL 18, es bastante malo. Eso es una sorpresa, porque el modo Longshot del juego anterior contó una de las historias más emocionantes y apasionantes en un juego deportivo. Sin embargo, esta segunda versión es tan absurda que es difícil creer que fue hecha por el mismo estudio.
La única manera en la que te sentirás a gusto con la historia de Longshot es si te gustan las telenovelas.
La historia comienza con Devin Wade, quien regresa de Madden NFL 18, en el campamento de entrenamiento de los Cowboys, luchando por un puesto en el roster. El personaje de Colt Cruise, que también regresa del juego anterior, está completamente fuera del fútbol, ganándose la vida como músico mientras espera que un equipo de la NFL le dé otra oportunidad. No te revelaremos el resto de la trama (que está llena de dramas familiares y personales irrelevantes) en caso de que decidas jugarla, pero basta decir que la única manera en la que te sentirás a gusto con la historia es si te gustan las telenovelas. De otra manera, te darás cuenta que el modo Longshot de este año es el punto débil de Madden NFL 19
Sin embargo, si EA Sports dice que recibió una abrumadora demanda para crear un juego de equipo más tradicional para Homecoming, tal vez estemos entre una minoría de fanáticos de juegos deportivos que creen que ‘menos es más’. Pero si eso es cierto, ¿no tendría más sentido jugar el modo de franquicia, o una exhibición contra un amigo? ¿No sería mejor separar la historia y el juego para encontrar lo mejor de ambos?
Lo cierto es que a muchos les gustaría ver relatos de deportes que cuenten historias verdaderamente memorables, como Remember the Titans, Field of Dreams, Rudy, o He Got Game. El modo Longshot de Madden 18 ofreció una idea del potencial de las historias deportivas en los juegos, pero la nueva versión se queda corta. No podemos ser los únicos que esperen más que eso.