Electronic Arts, la compañía detrás de FIFA, el nuevo Battlefield 2042 y Need for Speed, entre otros, sufrió una grave brecha de seguridad que algunos hackers aprovecharon para robar el código fuente de FIFA 21 e información crítica sobre otros de sus productos.
Según el reporte de Vice, los atacantes publicaron en foros que obtuvieron un total de 780 GB de datos. El número por sí mismo no es tan impresionante, pero sí lo es el tipo de información vulnerada, entre la que se encuentra el mencionado código fuente de títulos como FIFA 21 o del motor gráfico Frostbite, creado por la propia EA y sobre el cual funcionan la mayoría de sus juegos.
Electronic Arts confirmó el problema y aseguró que en el hackeo no hubo información comprometida relacionada a datos de usuarios, así que no hay ningún riesgo relacionado con la privacidad de las personas.
EA también asegura que nada de lo obtenido por estos piratas informáticos significará un impacto mayor en sus proyectos y que ya trabajan con la policía para determinar qué fue lo que ocurrió.
Por su parte, los hackers ya están tratando de vender la información obtenida, la cual podría ser muy relevante para los principales competidores de EA. O tal vez no. Parece difícil que una compañía rival quiera ensuciarse las manos con algo así, más allá de saber qué hay detrás el motor Frostbite.
Por ahora, ese tema compete a las autoridades. Para los usuarios, lo importante es saber que —hasta ahora— sus datos no han sido vulnerados como ocurrió en 2011 con la brecha de seguridad de la PlayStation Network, en la que hubo hasta números de tarjetas de crédito comprometidos.