La pelea de Fortnite con Apple por la salida de Epic Games de las plataformas de pago de las tiendas de aplicaciones también hizo que la ola llegara a Google, que también sacó la popular app de su Play Store.
«El ecosistema abierto de Android permite a los desarrolladores distribuir aplicaciones a través de múltiples tiendas de aplicaciones. Para los desarrolladores de juegos que eligen usar Play Store, tenemos políticas coherentes que son justas y mantienen la tienda segura para los usuarios», sostuvo la empresa con sede en Mountain View.
Y agregó: «Aunque Fortnite sigue estando disponible en Android, ya no podemos hacerlo en Play porque viola nuestras políticas. Sin embargo, agradecemos la oportunidad de continuar nuestras discusiones con Epic y traer Fortnite de regreso a Google Play».
Sin embargo, aún puedes instalar Fortnite en Android. La propia Epic dirige a los visitantes a su sitio web, donde pueden descargar el juego a través de la aplicación Epic Games o a través de Samsung Galaxy Store en dispositivos Samsung.
Google ha aclarado en sus términos de condiciones cómo operan los juegos en su aplicación.
«Los desarrolladores que ofrecen productos dentro de un juego descargado en Google Play o que brindan acceso al contenido del juego deben usar la facturación integrada en la aplicación de Google Play como método de pago», explicó.
A tribunales
Tal como lo había hecho previamente con Apple, Epic Games demandó a Google por supuestas prácticas monopólicas y anticompetitivas en su tienda de aplicaciones.
El comportamiento del gigante tecnológico, argumentó la también responsable del motor Unreal, rompe la promesa original de «ecosistema abierto» atribuida a Android y deja al consumidor sin opciones, informó Digital Trends.
Según la parte demandante, la violación de las leyes Sherman y Cartwright de California le han permitido a Google construir un monopolio y sofocar a la competencia en la distribución de aplicaciones de Android, “utilizando innumerables barreras contractuales y técnicas».
Epic Games lleva a Google a los tribunales por dos cargos: el monopolio sobre cómo se distribuyen las aplicaciones de Android y el impuesto a los bienes digitales de Play Store, que permite a Google quedarse con 30 por ciento de cada compra realizada dentro de aplicaciones como Fortnite.
“En gran medida, la demanda es idéntica a la presentada contra Apple y es el capítulo más reciente de la campaña del estudio de juegos contra las compañías detrás de las dos plataformas móviles más grandes”, añadió el sitio.
Para Epic Games, «si no fuera por el comportamiento anticompetitivo de Google, el ecosistema de Android podría estar a la altura de la promesa de competencia abierta, proporcionando a los usuarios y desarrolladores más innovación, precios significativamente más bajos y una variedad de plataformas de pago».
La empresa recalcó que no busca una «compensación monetaria» ni un «trato favorable», sino que «medidas cautelares que cumplan la promesa incumplida de Google: un ecosistema de Android abierto y competitivo para todos los usuarios y actores de la industria».
La demanda también afirma que Google intervino y bloqueó un posible acuerdo entre OnePlus y Epic Games. La asociación habría permitido precargar Fortnite en sus teléfonos y, por lo tanto, evitar los impuestos de Play Store.
Un acuerdo potencial similar con LG tampoco pudo concretarse porque el fabricante coreano tenía un contrato para «bloquear la descarga alternativa a Google Play Store», agregó la misma fuente.
*Actualizada el 14 de agosto de 2020 con la demanda de Epic Games contra Google