Surgida de una colaboración entre los investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts Katia Vega, Xin Liu, Viirj Kan y Nick Barry, junto a los investigadores de la Escuela de Medicina de Harvard Ali Yetisen y Nan Jiang, el Dermal Abyss viene a demostrar el enorme potencial que tienen los tatuajes con biosensores integrados, los cuales cambian de color como señal cambios en el metabolismo del cuerpo. El trabajo es muy interesante, pero también plantea otras cuestiones, como el si estamos dispuestos —o no— a mostrar públicamente información sobre la salud de nuestros cuerpos.
«La utilización de biosensores tatuados puede proporcionar mediciones de biomoléculas en un monitoreo continuo», dijo Vega a Digital Trends. «Reemplazamos las tintas tradicionales con biosensores que señalan cromáticamente la concentración de sodio, glucosa y de iones H + (pH) en el líquido intersticial de la piel : El sensor de pH cambia entre púrpura y rosa, mientras que el sensor de la glucosa varía entre azul y marrón. El sodio y un segundo sensor de pH fluorescen a mayor intensidad bajo luz UV. Serían muy útiles para informar sobre la diabetes, la deshidratación o el control de los niveles de pH».
En la actualidad, las tintas con biosensores se han limitado a usarse como pruebas en la piel de algunos cerdos, aunque Vega asegura que la respuesta del público en general ha sido muy favorable, dando a entender de que existe un mercado potencial, si es que alguien está dispuesto a invertir en él.
«Estamos contentos de tener una respuesta positiva del público», dijo. «Del mismo modo que la industria de los vestibles se está integrando en la moda, imaginamos nuevas asociaciones entre las compañías biotecnológicas y los profesionales de la piel, como los expertos en prótesis y tatuadores, adoptando la idea de un dispositivo humano integrado en la piel. El propósito del trabajo concebir una nueva era de biosensores integrados, aunque como tales, actualmente no hay planes para desarrollar nuestro Dermal Abyss como un producto comercial, o incluso para llevar a cabo ensayos clínicos con él».
De seguro, será cosa de tiempo hasta que se comiencen a usar tanto médica como comercialmente, ya que se trata de un desarrollo muy interesante.