En Noviembre del 2014, cuatro emprendedores franceses lanzaron un video de un concepto de brazalete o pulsera llamada “Cicret”, que puede convertir la piel del antebrazo en una pantalla táctil.
Hoy, cuatro meses más tarde, el concepto se vuelve realidad con la presentación del primer prototipo integrando un “picoproyector » (pico= muy pequeño), que proyecta en un ángulo muy bajo la imagen en nuestro brazo, mientras que ocho sensores detectan las pulsaciones y gestos que hagamos sobre una pantalla proyectada en nuestra piel, aunque esté mojada.
La pulsera Cicret que funciona sobre cualquier color de piel y a plena luz del día, se empareja con un dispositivo móvil para navegar, leer correos, ver películas y originar o atender llamadas como si estuviéramos manejando un teléfono o tableta.
Sus desarrolladores quieren convertir el proyecto en posible y han recurrido al sistema de financiación masiva o “crowdfounding” vía PayPal, para cubrir los casi 900.000 dólares (850.000 Euros), que cubrirían los costos de producción y gastos legales.
Aquí está el video para que veas como funciona: