Si quieres adquirir un Apple Watch, podrías estar considerando una de dos opciones; el más reciente, o el modelo anterior. Después de todo, la compañía lanza uno nuevo cada año – ¿qué tanto podría haber cambiado? ¿Es tan grande la diferencia? Enfrentamos al Apple Watch Series 7 vs. Apple Watch Series 6 para ver cuál es la mejor compra en este momento.
Diferencias clave entre ambos modelos
No esperes ningún cambio radical entre los dos modelos porque no lo hay, pero sí varios detalles que marcan la diferencia; en específico, tres aspectos. Lo primero es el tamaño de la pantalla y la reducción de los marcos.
Los tamaños de 40 y 44 mm del Series 6 son de 41 y 45 mm en el Series 7. Sobre el papel puede parecer poco, pero en la práctica tener una mayor superficie de pantalla (20 por ciento más) para maniobrar se nota mucho.
Además, el nuevo reloj incorpora un teclado en el panel, lo que facilita mucho responder a los mensajes. En el Series 6 podemos escribirlos a mano o con voz, pero por lo general (al menos en mi caso) suele dar muy mal resultado.
Un detalle importante sobre la pantalla es que esta es 70 por ciento más brillante en el Series 7 respecto al Series 6. Esto también se nota y mucho, más en exteriores con mucha luz donde en ocasiones es complicado visualizar las notificaciones en la pantalla.
Otro cambio sustancial lo encontramos en el sistema de carga del reloj. Y es que el Series 7 se carga 33 por ciento más rápido que su predecesor, o sea, que es capaz de pasar de 0 a 80 por ciento en 45 minutos, en comparación a la hora que le lleva esta misma operación al Watch Series 6.
Qué sigue igual
Ambos wearables son muy similares en cuanto a su rendimiento y la duración de su batería, que sigue siendo igual (unas 18 horas). Así que, aunque adquieras el nuevo modelo no te librarás de tener que cargarlo a diario.
Los dos también incluyen características importantes relacionadas con los sensores de salud, como la función de electrocardiograma (ECG) y la posibilidad de medir la cantidad de oxígeno en sangre (SpO2).
Por otro lado, una de las ventajas de que no haya grandes cambios en el diseño entre ambos es que, si te decides a comprar el modelo nuevo y tenías el anterior, podrás aprovechar las correas de este, pues aunque la pantalla es más grande el chasis sigue siendo del mismo tamaño.
Conclusión
El Apple Watch Series 7 no es una revolución, sino una tímida mejora entre generaciones. El aumento de tamaño de la pantalla siempre es bienvenida, pero realmente si no has usado el Series 6 es algo que apenas vas a apreciar.
La realidad es que reemplazar el Apple Watch Series 6 por el Series 7 no es algo que te vaya a cambiar la vida y probablemente merezca más la pena esperar a la próxima generación, pues en ella sí encontraremos cambios realmente notables.
Eso sí, si vienes de modelos anteriores como los series 5 o 4, el Apple Watch Series 7 podría merecerte la pena, pues el precio entre los dos es muy similar, aunque hoy día apenas haya stock del Series 7.