Una acusación muy grave en medio de la pandemia de coronavirus es la que esbozó la Unión Europea (UE), luego de acusar a China de estar detrás de ciberataques a hospitales de la comunidad del viejo continente.
La presidenta de la Comisión de la UE, Ursula von der Leyen, subrayó que la UE no «tolerará» dicha actividad maliciosa.
Las acusaciones fueron formuladas al concluir una cumbre UE-China el lunes 22 de junio, que reunió a autoridades europeas y al presidente del Consejo Charles Michel con sus homólogos chinos, el primer ministro Li Keqiang y el presidente Xi Jinping, para conversaciones por videoconferencia.
«Hemos visto ciberataques en hospitales y centros informáticos dedicados», dijo von der Leyen.
A principios de junio, los miembros de la alianza de la OTAN emitieron una declaración condenando «actividades cibernéticas desestabilizadoras y maliciosas dirigidas contra aquellos cuyo trabajo es crítico para la respuesta contra la pandemia, incluidos los servicios de salud, hospitales e institutos de investigación».
Incluso en abril el jefe de asuntos exteriores de la Comisión Europea, Josep Borrell, dijo que se habían registrado «actividades cibernéticas maliciosas» en todo el sector sanitario de Europa, incluidas campañas de distribución de phishing y malware, actividades de escaneo y denegación de servicio distribuida.
En Praga, República Checa, se habían entregado los primeros indicios de un ciberataque a la infraestructura de salud.
El secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, incluso había entrado en el debate sobre ataques cibernéticos contra hospitales checos, pero se abstuvo de llamar a ningún actor estatal en particular.
«Hacemos un llamado al actor en cuestión para que se abstenga de realizar actividades cibernéticas maliciosas perjudiciales contra el sistema de salud de la República Checa o una infraestructura similar en otros lugares», dijo.