Una investigación realizada por varios medios, entre ellos The Washington Post, The Guardian y Le Monde, reveló cómo el software espía Pegasus, que pertenece a la empresa de vigilancia israelí NSO Group, fue utilizado para hackear los teléfonos inteligentes de periodistas, activistas, ejecutivos y políticos en todo el mundo.
Este software es vendido a los gobiernos para que rastreen a terroristas y criminales. La investigación tuvo acceso a cerca de 50,000 teléfonos identificados como pertenecientes a personas de interés para los clientes de NSO Group.
Un analista de amenazas de Avast explicó que Pegasus es una herramienta de acceso remoto con capacidades de spyware, es decir, una herramienta con la que se puede vigilar a distancia el teléfono de una persona y acceder a ciertos elementos como la cámara o el micrófono, además de llevar a cabo algunas acciones como realizar una captura de pantalla o acceder al registro de las pulsaciones.
De acuerdo con la investigación, el programa de espionaje se instala cuando el usuario pincha un enlace desde su dispositivo, aunque en algunas ocasiones se puede hacer sin este enlace.
Con él, los responsables pueden extraer datos de aplicaciones de mensajería, como WhatsApp y Facebook, así como de servicios de correo electrónico y navegadores.
La investigación indicó que varios de los números que aparecen en la lista se concentran en 10 países: Azerbaiyán, Baréin, Hungría, India, Kazajistán, México, Marruecos, Ruanda, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Se descubrió también que esas 10 naciones han sido clientes de NSO Group.
En tanto, entre los periodistas afectados, algunos de ellos trabajan para medios como CNN, Associated Press, Voice of America, The New York Times, The Wall Street Journal y Bloomberg News, así como para el francés Le Monde, el Financial Times británico y Al Jazeera, de Catar, entre otros.