El gobierno de Rusia, a través de la presidenta de su banco central, Elvira Nabiúllina, invitó a bancos e instituciones financieras de otros países a sumarse al SPFS, el equivalente ruso al sistema de pagos internacionales SWIFT.
La invitación llega luego de que la Unión Europea acordó desconectar varios bancos rusos del sistema SWIFT como parte de las sanciones impuestas a Rusia por invadir a Ucrania. Se prevé que a esta medida se sumen países como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Japón, lo que daría un golpe sin precedentes a la economía de Rusia.
SWIFT, siglas en inglés de Sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales, es un sistema que habilita la conexión para el envío y recepción de pagos de más de 11,000 bancos en 200 países. Dejar fuera del sistema SWIFT a los bancos rusos es una forma de aislarlos del sistema financiero internacional.
Sin embargo, Rusia considera que puede contrarrestar la medida al pedir a los bancos de sus países aliados activar el sistema que proponen.
“SPFS puede reemplazar a SWIFT en el territorio ruso y otros participantes también podrán conectarse desde el extranjero”, dijo Nabiúllina en una nota publicada por el agencia estatal de noticias RT.
Según Rusia, más de 20 bancos de Bielorrusia (país aliado del presidente Vladímir Putin) están conectados a SPFS.
La agencia de noticias TASS señala que ya se realizan negociaciones para que bancos de China, así como las subsidiarias en Alemania y Suiza de grandes bancos rusos, se sumen al sistema SPFS.