Un investigador de la Universidad de Stanford diseñó un algoritmo de inteligencia artificial que presuntamente es capaz de determinar la orientación política de una persona al analizar ciertas características de su cara.
Los detalles de la elaboración del algoritmo fueron publicados en la revista Nature por Michal Kosinski, quien utilizó como base de datos fotografías de cerca de un millón de personas de Estados Unidos, Reino Unido y Canadá tomadas de un sitio de citas y de la plataforma de experimentación psicológica de Facebook MyPersonality.
En ambas plataformas, detalló Kosinski, los usuarios manifestaron expresamente si sus convicciones políticas se ubicaban en el espectro liberal o conservador.
Con estos datos, Kosinski diseñó el algoritmo para identificar alrededor de 2,000 similitudes en los más del millón de rostros que analizó.
Según sus hallazgos, las personas identificadas como liberales eran más propensas a mirar directamente a la cámara y también mostraban expresiones de sorpresa en sus fotos. En tanto, los conservadores tendían a mostrar más enojo y era más probable que las fotos correspondieran a hombres blancos de edad avanzada.
Pese a la validez metodológica del algoritmo, experimentos de inteligencia artificial como este generan críticas debido a que tratan de aplicar conceptos de ciencias duras a comportamientos sociales complejos.
Además, la idea de que la personalidad de una persona puede determinarse a partir de rasgos faciales corresponde a un concepto pseudocientífico conocido como fisiognomía. No obstante, hasta ahora la ciencia rechaza esta idea.
De hecho, el algoritmo diseñado por Kosinski es la aplicación de técnicas de inteligencia artificial a una pseudociencia.