Este es un hotel al aire libre llamado Null Stern. Hay claramente estructuras arquitectónicas que permiten descansar rodeado de la naturaleza, pero nadie lo ha hecho como este hotel.
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Tiene una cama y dos mesas de noche con sus respectivas lámparas. Eso es todo. El cuarto es supremamente minimalista y cruza los dedos si te dan ganas de ir al baño en la noche.
Si eres de los que cree que esta es una experiencia que debe vivirse alguna vez en la vida, vale la pena aclarar que si decides utilizar este hotel, viene con servicio al dormitorio y con desayuno incluido.
El costo por noche es de apenas $253 dólares por noche. Como lo mencionamos anteriormente, no hay baño en la habitación y te tocará caminar 10 minutos si tienes ganas de entra al baño.
Los dueños del Null Sternn Hotel contactaron a los artistas suizos Frank y Patrick Riklin después de haber visto sus diseños innovadores de habitaciones al aire libre en un festival de arte.
El hotel ya tiene en su portafolio otro tipo de cuartos extraños. Hace muchos años cuando el hotel abrió sus puertas como un hotel de lujo, su primer cuarto fue un antiguo bunker nuclear.
“A pesar de que esta versión es radicalmente diferente a la primera en el bunker nuclear, la esencia y el espíritu del concepto es la misma: la de poner al cliente en el cetro de la experiencia y en enfocarnos en reducir todo al mínimo”, afirma Daniel Charbonnier a Inhabitat.
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Afortunadamente, los clientes puedes cancelar su estadía sin problemas. El Null Stern Hotel está aceptando reservas hasta para la próxima primavera, verano y otoño.
