En 2015 en París, el Estado Islámico asesinó en un atentado a la joven Nohemí González, ciudadana estadounidense que se encontraba en la capital francesa por esos días. Después de su muerte, Youtube se llenó de videos del momento y por eso en 2023 su familia está llevando a Google a la Corte Suprema.
Los González acusan que el gigante de Mountain View tienen responsabilidad en la reproducción continua del video, gracias a las recomendaciones de su algoritmo.
Google argumentó que no es responsable, citando una ley de décadas de antigüedad.
La ley de 1996 también permite a las empresas eliminar contenido que se considere que viola las reglas de la plataforma.
El caso marca la primera vez que se le pide a la Corte Suprema que defina el alcance de la Sección 230 y determine si plataformas como YouTube, Facebook y Twitter están protegidas cuando sus algoritmos dirigen a los usuarios a cierta información.
Durante la audiencia, los jueces señalaron que el panorama actual de Internet había cambiado enormemente desde que la ley se promulgó por primera vez hace 27 años.
Los jueces también expresaron su preocupación de si un fallo a favor de la familia de González podría abrir la puerta a una avalancha de litigios contra las compañías tecnológicas.
«Están creando un mundo de demandas», dijo la jueza Elena Kagan, una liberal. «En realidad, cada vez que tienes contenido, también tienes estas opciones de presentación y priorización que pueden estar sujetas a demanda».
El juez Brett Kavanaugh, un conservador, expresó su preocupación de que cualquier fallo para limitar el escudo legal para las empresas de Internet «realmente colapsaría la economía digital».
La familia de González demandó por primera vez a Google en 2016, argumentando que el gigante tecnológico había violado las leyes federales antiterroristas al recomendar videos publicados por el Estado Islámico a sus usuarios.