Los astronautas de la Estación Espacial Internacional (ISS), celebraron este fin de semana un acontecimiento histórico al recibir una nueva herramienta por correo electrónico.
Es la primera vez que la tripulación que orbita a 386 kilómetros de la superficie terrestre, ha podido fabricar una suerte de “llave Inglesa” necesaria para tareas de reparación de la nave.
La llave fue diseñada por Made in Space, la misma empresa californiana que hace dos meses suministró la impresora 3D fabricada especialmente para que pueda funcionar en condiciones de ingravidez y donde los objetos tienden a flotar.
La llave inglesa y sus partes movibles, fueron probadas en los laboratorios que la agencia espacial NASA posee en Houston (Texas), y luego su diseño fue enviado por correo electrónico a la impresora 3D que imprimió el objeto en cuatro horas.
NASA planea el próximo año, reemplazar la máquina que está en órbita por una impresora comercial mucho más grande. Mientras tanto, la Agencia Espacial Europea estima que podrá enviar al espacio su propia impresora 3D en el 2015.