Argus Caruso Saturnino, es el nombre del arquitecto brasileño y urbanista que presento ayer en una laguna cercana a la ciudad de Rio de Janeiro (Brasil), una bicicleta anfibia que funciona tanto en tierra como en el agua, y cuya intención es que se transforme en un medio de transporte en ciudades con lagunas y ríos.
«Quiero incitar a la gente a que piense nuevas formas de movilidad urbana utilizando energías limpias», afirmó Saturnino, sentado en su vehículo bautizado “Bikeboat InVenta”, una bicicleta adaptada con flotadores de madera liviana y una vela de tela y que mide 6.7 pies (2 metros) de largo, 3 pies (90 centímetros) de ancho y 66. 1 libras (30 kilos) de peso.
La idea de Bikeboat comenzó en 2010 durante un viaje a la costa norte y noreste del Brasil y donde paseaba por las playas de arena con una bicicleta equipada con una vela. «Trabajé con el viento y alcanzó los 40 kilómetros por hora y sin pedalear. Mi mayor dificultad, sin embargo, era cruzar los ríos. A veces pasaba horas esperando un barco. En esos momentos tuve el ”clic” para crear la bicicleta flotante que construí con mis propias manos», dijo.
“Quiero mostrarla, registrar en fotografías y videos las reacciones de la gente, recibir testimonios e intercambiar ideas. Será una manera de difundir la utilidad de este vehículo que es sostenible y eficiente, y puede cortar camino a través de lagos y ríos. En una zona muy urbana, es útil en casos de congestión o durante inundaciones «, concluyo diciendo.