A un ritmo rápido están creciendo en Facebook y su matriz Instagram nuevos grupos QAnon, cuyos adeptos se encargan de difundir absurdas e infundadas teorías conspirativas.
Así lo estableció una investigación de The Guardian, que detectó 170 grupos, páginas y cuentas en Facebook e Instagram, que acumulan más de 4.5 millones de seguidores en al menos 15 países.
El medio registró a finales de junio más de un centenar de páginas, perfiles, grupos y cuentas con al menos 1,000 seguidores, el más grande de los cuales tenía 150,000 adeptos, con un total de 3 millones.
Para el domingo 9 de agosto, los mismos habían experimentado un aumento cercano al 34 por ciento. El más numeroso incluía más de 200,000 miembros.
“El mismo trabajo reconoció 73 grupos y páginas adicionales dedicados a QAnon con al menos 1,000 seguidores o miembros. Muchos son nuevos, fundados en mayo de 2020 o después, y ya han acumulado 560,000 personas”, detalló.
The Guardian documentó grupos especialmente numerosos en Alemania, Italia, Polonia, Países Bajos, Australia y Reino Unido, entre otros advertidos en Irlanda del Norte, Canadá, México, Brasil, Bulgaria, Hungría, República Checa, Rumania, Serbia y Eslovenia.
El fortalecimiento se produjo en momentos en que Twitter “emprendió una amplia represión contra su contenido”, que acusó el movimiento de «un claro y bien documentado daño informativo, físico, social y psicológico fuera de línea».
Pese a las declaraciones de intenciones de Facebook, su algoritmo “ha seguido promocionando los grupos QAnon entre los usuarios y algunos han experimentado un crecimiento explosivo”, afirmó el periódico británico.
Los adherentes al movimiento suelen ser fanáticos de extrema derecha que piensan que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, libra una soterrada lucha contra rivales del opositor Partido Demócrata y celebridades de Hollywood amantes de la pedofilia y el tráfico sexual.
Para el investigador principal del Proyecto de Cambio Social y Tecnológico del Centro Shorenstein de Harvard, Brian Friedberg, Facebook debe ser increíblemente cuidadoso con la forma en que maneja cualquier censura contra QAnon, sobre todo porque se acercan las presidenciales en Estados Unidos.
“Queremos detener a QAnon porque degrada la confianza en nuestras instituciones, difunde información médica errónea y potencialmente fomenta el extremismo violento. Sin una explicación de por qué se prohíbe el contenido de QAnon, esto no va a hacer nada para disuadir las creencias”, planteó.
Citado por el mismo periódico británico, dijo que “la lucha eficaz contra QAnon probablemente requerirá ‘intervenciones fácticas’ de los medios de comunicación conservadores y de los líderes en los que confían quienes tienen más probabilidades de creer en QAnon: cristianos evangélicos conservadores, blancos y personas mayores”.
“Dado que QAnon parece centrarse en gran medida en el apoyo a la política de Trump, es necesario que intervengan los miembros conservadores de sus socios de confianza. El objetivo no es la supresión de la libertad de expresión, sino que recuperar la confianza en nuestras instituciones y políticas electorales”, finalizó.