Cuando los usuarios interactúan con publicaciones negacionistas del Holocausto judío, el algoritmo de Facebook “promueve activamente” contenidos similares.
Así lo dio a conocer una investigación presentada por el Instituto para el Diálogo Estratégico (ISD) al que tuvo acceso el diario inglés The Guardian.
De acuerdo con el estudio de la organización —que combate el extremismo y la polarización en Reino Unido—, si se realiza una búsqueda en Facebook con el término “Holocaust” (Holocausto, en inglés), la plataforma muestra, entre las sugerencias, páginas en las que se afirma que el genocidio judío perpetrado por las nazis durante la Segunda Guerra Mundial nunca existió.
El ISD también encontró enlaces a editores que venden artículos y literatura revisionistas, también a páginas dedicadas al historiador británico David Irving, un conocido negacionista.
Los hallazgos coinciden con el pedido que han realizado varios sobrevivientes del Holocausto al CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, para eliminar este tipo de material de la red social.
El miércoles 12 de agosto, Facebook anunció que prohibiría las teorías de conspiración que aseguran que los judíos “controlan el mundo”.
Sin embargo, no ha querido clasificar la negación del Holocausto como una forma de discurso de odio, una postura que el ISD describe como un “punto ciego conceptual”.
Jacob Davey, gerente senior de investigación del ISD, señaló que la decisión de Facebook se enmarca bajo el pretexto de proteger el debate histórico legítimo, pero pasa por alto la razón primera por la que las personas se involucran en la negación del Holocausto.
“Es una herramienta deliberada que se utiliza para deslegitimar el sufrimiento del pueblo judío y perpetuar los antiguos tropos antisemitas. Cuando la gente hace esto explícitamente, debe verse como un acto de odio”, agregó.
El ISD descubrió al menos 36 grupos de Facebook, con un total de 366,068 seguidores, que están específicamente dedicados a la negación del Holocausto o que albergan dicho contenido.
Los investigadores también encontraron que el contenido de negación del Holocausto es fácilmente accesible en Twitter, Reddit y YouTube.